Tres gaiteros en sin gaita. Asturies, 2013. |
Sali a tirar la basura.
Había un cielo tan claro y luminoso que parecía de día, como instantes antes de una explosión, cuando vemos la luminosidad del estallido pero aún no nos ha llegado su sonido. Hasta los cubos, relucientes por los reflejos de las farolas, querían trascender su condición de contenedores de mierda volviéndose diáfanos y aéreos. El espectáculo era entre sobrecogedor y delirante. No había nadie en la calle con quién compartir aquella rareza. Me recogí en respetuoso silencio pensando si no serían cosas mías, olía como en la víspera de una catástrofe, a cera y a grisú.
Salud y felices pesadillas
ra
A saber que te habías tomado...
ResponderEliminarUn besito
Viriato
Un yogurín bebido, César del alma!
EliminarMás besos.
Pues yo más bien diría que parecen los cubos de la basura de Fátima.
ResponderEliminarBesazos
Sí, tienen más de milagreros que de alucinantes.
EliminarSalud.
ramiro