jueves, 5 de diciembre de 2013

95


Cada uno en su casa y mierda en la de todos


Salí a tirar la basura



enfilando decidido hacia los cubos. Pero me detuve en seco, aunque había llovido: Los habían colocado
treinta metros más arriba del punto habitual. Impaciente como soy, me saca de mis casillas que me anden cambiando las rutinas sin avisar y fui refunfuñando hasta el nuevo emplazamiento. Recordé que en una reunión de vecinos se había acordado unificar los puntos de recogida de los dos portales del edificio, para ahorrar unos eurillos. La tomé entonces con el presidente de la comunidad, que habría ordenado colocar el punto de recogida junto a su portal. Cuando llegué, me cagaba en los privilegios de toda la clase política del país. Sin embargo, una vez soltada mi mierda, mientras poco a poco regresaba a casa, me iba reconciliando lentamente con el mundo y las debilidades humanas. Al fin y al cabo, pensaba, estos dos minutos de más me brindan la oportunidad de una reflexión algo más larga, quizá la ocasión de un encuentro fortuito e interesante en los últimos segundos... . El conformismo es un azote.



Rockers de Cárpatos emulando a Iron Maiden.




Salud y felices pesadillas.


ra