lunes, 30 de junio de 2014

Siembra de vientos


 Aguada sobre cartulina. Pintura en polvo, residuos. Espátula.
Ramiro Rodríguez Prada.  2003. 


Cosecha


En realidad  él no quería esa vida, no le gustaba, casi se puede decir que fue un accidente. Su padre era militar, uno de esos hecho a sí mismo, como le gustaba decir, lo que venía a significar que no había pasado por la academia y había ascendido chusco a chusco y a puro huevo. Duro con la tropa, duro con los profesionales subordinados y duro con sus hijos, a la única que nunca había tocado era a su esposa, una mujer de armas tomar, nieta e hija de militar. Con ella y con el mando era más que sumiso.

Se retiró sin haber podido hacer carrera de los hijos, a los que trató de encauzar a base de brutalidad. De nada le sirvieron los halagos, su otra arma, y menos las palizas, los chavales mostraron muy pronto un carácter indolente y si tenían algún sentimiento claro por su padre, éste era el odio.

Malcriados por los caprichos que el hombre satisfacía intentando atraerlos, y maltratados por una disciplina salvaje que los doblegara, fueron incapaces de terminar el bachiller y vegetaban en el domicilio familiar, sin beneficio y sin el menor interés por oficio alguno.
El militar hizo cuanto supo para que ingresaran en el Ejército, pero estaba claro que aquellos atorrantes no tenían el espíritu marcial, ni los cojones que un soldado español debe tener. No parecían hijos suyos. De hecho eran idénticos al capitán de la compañía en su primer destino como sargento. Aquel hideputa huevón que, sin embargo, le había amargado la vida.

Esa idea llegó a convertirse en una obsesión. El desenlace era previsible. Una noche mató a su esposa y se pegó un tiro. No mató a los hijos porque ya sólo venían a casa por dinero y apenas los veía. Andaban metidos en drogas y en un par de años fundieron lo que les dejaron los viejos.

Se pelearon y cada uno se fue por su lado, los dos muy enganchados a la coca, con la que se ganaban la vida trapicheando.
Cargados de deudas y de amenazas de muerte, maleducados en la peor de las versiones cuartelarias, lo único que conocían de cerca, y sin salida, terminaron enrolándose en compañías de seguridad distintas, y finalmente como mercenarios, donde más dinero se ganaba. La guerra nunca dejó de ser uno de los grandes negocios.

Llevaban años sin tener noticias uno del otro. Por eso no sabían que sus respectivas empresas los habían alquilado a bandos enfrentados en una de las tantas guerras de este mundo.

El mayor era ya oficial en aquella partida de irregulares, compuesta por tipos de todas las procedencias y cataduras y por una leva forzosa de jóvenes del lugar, la diversión de la mayoría de los cuales era la violación, la tortura, el asesinato y el saqueo. El terror y el sadismo eran otras tantas armas de guerra utilizadas por los dos bandos.

Lo llamaron, borrachos y drogados, para que fuera a echar un vistazo a los presos de ese día antes de darles matarile. Estaban en una choza, los habían torturado. Eran dos hombres blancos, y tres negros muy jóvenes.
Tardó en reconocerlo. Le habían cortado la lengua y la nariz, y estaba ensangrentado e hinchado por los golpes. Lo miraba desde un lugar ya inalcanzable. Era su hermano. Uno de sus soldados, reclutados en el país a la fuerza, apenas un niño, sacó una pistola y riendo apoyó el cañón en el ojo del prisionero y disparó.

Fue una reacción automática, empuñó su arma, se giró y sin mediar palabra mató al chaval. Los compañeros quedaron como paralizados un momento, mirándolo desconcertados, y a continuación, como si obedecieran al unísono una orden de fuego, descargaron sus fusiles de asalto sobre él.


Ramiro Rodríguez Prada


Los Inhumanos.   Manué no te arrime a la paré.

http://www.youtube.com/watch?v=l76FsMgUbyU


Salud y paz para los pobres

domingo, 29 de junio de 2014

152


En orden y concierto.
Galicia 2013.


Salí a tirar la basura



fuera de punto y en el mes equivocado, agripado y anacrónico. Por la calle bajaba una manifestación nocturna de lo más variopinta. No era Semana Santa ni los que desfilaban lo hacían en religioso silencio, al contrario, coreaban eslóganes mundanos y primaba el cachondeo, la algarabía, el descontrol y el despendole. Parecían habituales de la noche, cada uno de la suya: taxistas, camareros, policías, enfermeras uniformadas, bomberos, recepcionistas, prostitutas... . Al frente de la banda una pancarta con la leyenda "La noche para quien la trabaja". Tampoco era carnaval porque ese día no pasaron los operarios de la limpieza nocturna, supuse que se habrían sumado a los manifestantes, si lo eran.



The Eureka Brass Band.  Tell Me Your Dream. 1951.




Salud y felices pesadillas.


ra

sábado, 28 de junio de 2014

Η Διδώ Σωτηρίου, Didó Sotiriu- 2


Fuente otomana. 
Rodas, 2013.

Ματωμένα χώματα -2
Tierras de sangre


Amelé Taburú.

Cap. V.
Es el nombre de los batallones de trabajo en la 1ª Guerra Mundial, donde los turcos enrolaron a la fuerza, en régimen de semiesclavitud, a los griegos de Asia Menor. El relato se va haciendo durísimo. Esta parte ocupa el mayor número de páginas y es el corazón de la novela. Pero el dolor y el sufrimiento no cederán un ápice a lo largo de todo el libro.
- "El odio y la brutalidad de la guerra pueden más que el amor, y las almas puras se quedaron en el campo de batalla, como banderas olvidadas." (92)

Cap. VI.
- "En enero de1915 llamaron a filas a mi quinta. Me presenté en Kusadasi junto a otros setenta paisanos. [...]. Al cabo de dos o tres días salíamos para incorporarnos a los batallones de trabajo de Ankara." (104)

Cap. VII.
- "Cuando la Constitución, en 1909, se creyeron todo lo que habían prometido los Jóvenes Turcos y dejaron de esconderse." (129)

Cap. VIII.
- "...luego otras, todavía más terribles, que ocurrieron en Erzurum, en Diyarbakir, en Sivas, en Kastamomu, en Cilicia, en Izmit y en otros lugares. [...]... las matanzas y persecución  de armenios durante la 1ª Guerra Mundial." (151)

Cap. IX.
Manolis Axiotis, el protagonista, recala al fin como siervo en casa de una familia turca que le salva la vida, donde es bien tratado y conoce el sincero amor de una chica musulmana que está dispuesta a fugarse con él. Axiotis escapa de los batallones de trabajo con un amigo, dispuestos a cruzar Anatolia ocultándose y viajando a pie por la noche, entre hambre, sed y mil penalidades.
- " '¡Un río!, gritamos los dos al unísono al ver el río Sangario.' " (154)
El  Sangario: Dios-río, hijo de Tetis y el Océano, a veces considerado padre de Hécuba, cuya madre sería Hétope o la ninfa Eunoe. En el contexto de la novela, y de la Historia, el Sangario eran las Termópilas de los turcos, según Didó Sotiríu, a partir de ahí los turcos no iban a permitir pasar a los griegos.

Κώστας Ρούκουνας.   Mórtissa Smyrniá. (1937)


Cap. X.
- "Todos robaban a manos llenas: pachás, comandantes, gobernadores y jefes de distrito, intendentes, proveedores, particulares. Se habían percatado de que Turquía ya había perdido la guerra y todos venga que te corre a pillar lo que podían." (172)
- " '¿Y cómo es que en Rusia se ha acabado esta maldita guerra?', preguntó Ahmet, el panadero.
'Pues es que he oído a unos prisioneros de guerra rusos hablar de un jefe con perilla, Lenin o algo así se llama, que ha dado orden de que dejen de combatir y así ha sido. Y por lo visto ha dado orden también de que no haya ricos ni pobres y así ha sido también. Y han repartido la tierra y han sacado a los príncipes de sus palacios y han metido en ellos a pobres como tú y como yo." (172-3)

Cap. XI.
- "Porque si vieras a los griegos ricos de Estambul, te quedabas de una pieza. ¡Habitaciones enteras llenas de oro! Pero de patriotismo, nada. Todo para el bolsillo. No tienes más que ver a Bolakis. Proveedor del ejército turco. ¡Oro a porrillo el muy cabrón! ¡El rey Midas! " (180)

- "Los turcos también estaban contentos, aunque hubieran perdido la guerra. Sus periódicos cambiaron de sonsonete. Ahora los enemigos eran los alemanes; y los traidores, Talat Pachá (N. del T.: Líder del Partido de la Unión y el Progreso) y Enver Pachá, que habían colaborado con ellos y llevado a Turquía a la perdición. Ahora los amigos eran los ingleses y los franceses -¿quién si no?- y sobre todo los norteamericanos. Todo eran halagos y decir amén. Pero antes de que enterraran definitivamente a Turquía, apareció un detractor de lengua acerada que no le bailaba el agua a nadie, una voz potente que llamaba a la insurrección: Mustafá Kemal. Hacía muchos años que Turquía no daba un hijo así." (186). No obstante, Atatürk, 'el padre de los turcos', había nacido en Salónica.

Maliétès. Banda greco-turca establecida en Francia. Live in Strasbourg, 2006.  Karsilamás.

Cementerio musulmán junto a Villa Cleóbulo, en la mezquita de Murad Reis.
Rodas, 2013.

Llegan los griegos

Cap. XII.
- "Ya no teníamos miedo a los turcos. Ahora eran ellos los que nos tenían miedo a nosotros." (195)
Nota del T.: "Según creencia popular griega, anillos y brazaletes trenzados con hilo rojo y blanco, protegen del traicionero primer sol de marzo." (205)
- "Y me puse yo también a gritar que había que echar al turco del país de la Manzana Escarlata." Nota del T.: "Mítico país del que afirman ser originarios los turcos." (207)

Cap. XIII.
- "En octubre de 1921 recibí la orden de incorporarme al cuarto regimiento de la primera división. En el tren conocí a un soldado de Creta que también acababa de salir del hospital y se incorporaba al mismo regimiento que yo. Se llamaba Nikitas Drosakis. Era estudiante y el Partido Popular lo mandaba siempre a primera línea del frente junto con otros cretenses indeseables." (222)

- "Leledakis, un compañero de La Canea, venizelista fanático, no paraba de meterse con un rival suyo que se llamaba Kuluriotis." (222
- "¡Sin Venizelos no habría ni Constantinopla ni Asia Menor ni Grecia que valga, desgraciado! ¡Que los aliados ya nos han dado cien veces por ahí y todavía nos van a dar otras tantas." (223)
- "La batalla del río Sangario, que duró veinte días..." (225), victoria turca sobre los griegos que puso término a su incursión en Asia Menor.
- "El sargento, un zote al que llamábamos Gravaritis, en cuanto se enteró de que Drosakis era estudiante y encima cretense, le hizo la vida imposible." (226)

Estavros Xarjakos.  Tis Amynis ta paidiá.

http://www.youtube.com/watch?v=Rj4EerB4uXE

- "Y cuando ingleses, franceses y norteamericanos se enteraron de que la armada italiana andaba por aguas de Asia Menor, tuvieron miedo de que los italianos les jugaran una mala pasada y desembarcaran en Esmirna, y mandaron llamar a Venizelos y le dijeron: 'Oye, ¿qué te parece?, ¿tiene Grecia arrestos para hacerse cargo de Asia Menor? Porque entonces los muy bribones necesitaba que les cubriera el ejército griego, ¿sabes? ¡Y Venizelos, ensoberbecido con sus sueños irredentistas, nos soltó en Asia Menor y aquí estamos, cavando nuestra propia fosa!" (228)
- "Me habló de un paisano llamado Prometeo que al parecer sufrió martirio por llevar la luz a los hombres." (230)
- "Cualquier sacrificio que se haga por el ser humano es poco. Con sudor y con sangre se consigue el progreso, gota a gota." (230)

Las tres últimas citas son palabras del cretense Drosakis, un personaje importante en la novela. Es un idealista y el germen de una sociedad diferente, un palíkaro moderno. No es en realidad un venizelista, él representa las nuevas ideas socialistas que están empezando a penetrar el pensamiento y abrir la conciencia de una clase obrera aún dormida, sacrificada entre una vida miserable, las guerras y los intereses de toda laya. Aunque Sotiríu -Drosakis- no lo expresará así, puesto que entonces ni este lenguaje era posible.

Sobre el tratado de Sèvres.
- " '¡Cabrones!', dijo haciendo rechinar los dientes."
'Ese lujoso jarrón de Sèvres nos ha salido resquebrajado de fábrica', dijo Lefteris. [...]
'¿Qué pasa, Nikitas? ¿Qué pasa con el Tratado de Sèvres?'. [...]
'¡Los franceses han firmado un acuerdo con Kemal por noventa años. Y los ingleses nos han canjeado por el petróleo de Mosul.' " (239)

La Conferencia de Londres (feb. mar. 1921), convocada por la Entente para intentar salvar el Tratado de Sevres, favorable a Grecia, pero que acabaría dando lugar al Tratado de Lausana (jul. 1923) por el que se garantizaba la integridad territorial de Turquía. (N. del T.) (240)

Zülfü Livaneli.  Böyledir Bizim Sevdamız.

http://www.youtube.com/watch?v=xilsXzhU1Eg 

Kilim  de seda.
Rodas, 2013.

Cap. XIV.
- "Nadie quiere mentar a la muerte funesta, pero se acaba convirtiendo en tu sombra. Te entran ganas de gritar: '¡Apartad de mí esa idea! ¡No ha llegado mi hora! ¡Por Dios, que todavía me quedan días por vivir¡ ¡Que lo he pasado muy mal, he sufrido mucho, todavía me queda mucho por hacer! ¡Soy joven!' " (242)
- "Kemal nos hizo llegar un mensaje: 'Me avergüenzo de semejantes enemigos.' " (248)

La entrada de los griegos en Anatolia, estuvo acompañada de saqueos, tropelías y matanzas en muchos de los pueblos que el ejército iba encontrando, cuando Atatürk se replegaba. La respuesta turca después de la batalla del río Sangario, mientras los griegos huían en desbandada, fue aún más salvaje si cabe.
La capacidad de combate de los griegos estaba agotada, sin hombres suficientes, pertrechos ni suministros. Empezó a cundir el descontento, los motines, las deserciones..., mientras "¡Kemal está quemando pólvora, que no son tracas de feria! ¿A él que más le da, si todo el mundo se pelea por pertrecharle, si todas las compañías extranjeras se han bajado los pantalones y están esperando sus arrumacos? ¡Malditos cabrones de mierda! " (246)

En el próximo capítulo veremos la cuarta parte de la novela, El desastre.

Safiye Ayla. Rosa Eskenazi.  Zeibékikos.

http://www.youtube.com/watch?v=Kesy3NyP2FI

Salud y buenos libros

Ramiro Rodríguez Prada


P. D. La novela  Ματωμένα χώματαTierras de sangre, de Didó Sotiríu, la editó en Barcelona Narrativa del acantilado, en noviembre de 2002, traducida por César Montolíu, que recibió el premio Antonio Tovar de traducción (2001), de la Asociación Hispano-Helénica. Cubierta de Marta Serrano. Vale.

viernes, 27 de junio de 2014

151


Pesos muertos.


Salí a tirar la basura



con tanto peso encima, que pensé en regresar al día siguiente, después de los años, al sagrado sacramento de la confesión, a ver si al menos descargaba la mala conciencia.



Σωτήρης Γαβαλάς. Στελλάκης Περπινιάδης.   Ηρωίνη και μαυράκι (Προύσα).1936.


http://www.youtube.com/watch?v=vLSLiKXMZxw


Salud y felices pesadillas.


ra

miércoles, 25 de junio de 2014

Somos gochos


¡No hace falta que lo juréis!


Cloacas millonarias


Por la parte del rulé lleva el banquero

tatuado un vaticinio en letras de oro:

Tú llegarás muy lejos, reza el texto.


Y fue tan cierto aquel secreto augurio,

que la caja de la mierda reventando un día 

llenó tres continentes de dinero negro.


De  Kolomancias.  2014.

Ramiro Rodríguez Prada



Pablo Hasél.   Odio justificado.

http://www.youtube.com/watch?v=a2S1hvgImu4


Salud

lunes, 23 de junio de 2014

150


Consejo de amigo.
Ribadeo. Galiza,  2013.


Salí a tirar la basura



aprovechando para echar un cigarro, aunque no tengo una familia intransigente que me prohíba fumar en casa. Por eso entre otras cosas, porque son tolerantes, trato de no atufarlos demasiado con mis malos humos. Pero hablando de humos chungos -sin querer leo higos chumbos-, es peor el mal carácter; yo me crié con las cocinas de carbón y el brasero de picón de los años cincuenta y sesenta del pasado siglo, en compañía de fumadores, pero me hizo más daño alguna bronca posterior en pisos con calefacción central libres de humo.



Pete El Conde Rodrígues.  Catalina la O.


http://www.youtube.com/watch?v=L6GI1r2teW4


Salud y felices pesadillas


ra

domingo, 22 de junio de 2014

Ovulando


Clínica abortiva  Las Escachaduras.
El Corral de Comedias.


La gallina enajenada


¡Ay, Vírgen de la Purísima Concepción, qué vida más triste la de una ponedora!, ¡viendo como te quitan, casi de debajo del culo, el huevo diario, cómo se malogran una y otra vez tus ansias maternales! Ni un solo pollito que sacar del huevo en una fila de ellos que llegaría a Roma. Tanta dilatación, tantos afanes, tanto cacareo, tanto pienso compuesto, ¡¿para qué?!

Eran tan fuertes mis deseos de tener pollitos, que en una ocasión escondí un huevo en el corral. Luego supe que otras muchas gallinas lo intentaron antes que yo. Lo estuve incubando tres meses por lo menos, febril y amorosamente, en un rincón oscuro, ¡pero nada! Al final, de tanto sentarme encima, se rompió. Olía ya a huevo podrido. ¡Qué inocente, ni siquiera sabía lo que era un gallo!...


Korvus Korax, ο Μάυρος.


Manolo Kabezabolo.  El aborto de la gallina.

https://www.youtube.com/watch?v=mVXV8KVCG5k


Salud

viernes, 20 de junio de 2014

149


Magia simpática.



Salí a tirar la basura



en un descanso publicitario de la película que veía por televisión. La habían cortado en un lance clave: el protagonista, un hombre de mi edad, se disponía a salir de su casa con dos bolsas de basura, camino de los contenedores, mientras en la calle un asesino a sueldo, en el interior de un coche, se preparaba para matarlo. Cuando pisé la calle no pude evitar el mirar con aprensión los coches aparcados en las cercanías. En el interior de uno de ellos había un hombre que me observaba. Al pasar a su lado vi que se abría la portezuela que daba a la acera. Solté las bolsas y quise correr, pero estaba clavado al suelo, paralizado por el terror. ¿Tienes fuego?, preguntó el hombre desde dentro. ¡Estoy congelado!, dije temblón. El paisano, mirándome como si viera a un pirao, cerró la puerta. Cuando llegué a casa la película ya había recomenzado y no pude ver la escena del supuesto asesinato.





Salud y felices pesadillas.


ra  

jueves, 19 de junio de 2014

Η Διδώ Σωτηρίου, Didó Sotiríou


Tierras de sangre,  Didó Sotiríu.
Cubierta, Marta Serrano.


Ματωμένα χώματα
Tierras de sangre


Buenos días. Tierras de sangre es mi novela más querida de toda la literatura griega moderna. Puesto que sabemos que las preferencias siempre tienen algo de caprichoso, en mi perfil sólo anoté dos libros, Campos de Castilla, de Antonio Machado, y Tierras de sangre, de Didó Sotiriu, Διδώ Σωτηρίου.

Si he tardado tanto tiempo en dedicarle algún capítulo es quizá porque me da hasta respeto, el respeto que produce el dolor, que es el motivo central de la historia. El sufrimiento de miles de personas, cientos de ellas con nombres y apellidos que Sotiriu anota religiosamente. Es una novela colectiva, pero donde cada actor, por humilde y escaso que sea su papel, tiene una identidad, no son seres anónimos, tienen cara, sentimientos, biografía...

La novela fue publicada en Grecia en 1962, y en España, por Narrativa del acantilado (2002), con traducción de César Montoliu.

Didó Sotiríu nació en Aydin (1909), a unos cien kilómetros en el interior de Anatolia, frente a la isla de Samos, como ya conté hablando de su sobrina Álki Zéi. Con ocho años, sus padres, arruinados, la enviaron con sus tíos a Atenas, donde se educó. Tras el desastre de Asia Menor, Η Μεγάλη Καταστροφή, I Megali Katastrofí, en 1922 sus padres tuvieron que abandonar Esmirna, donde se habían trasladado, y se instalaron en El Pireo. Otros datos biográficos imagino que irán apareciendo en el curso de esta redacción.

 Γ. Τσανάκας.  Μινόρε Μανες.  Σμύρνη 1909.

http://www.youtube.com/watch?v=QllMkGSeCm4

Para enmarcar la novela, nada mejor que copiar íntegro el prólogo de la propia Didó en la edición griega de 1962, que también incluye la castellana.

Hace cuarenta años que la población griega de Asia Menor fue expulsada de su ancestral morada. Ese destierro es uno de los capítulos más estremecedores de nuestra historia reciente.
Los que vivieron en medio de aquella convulsión van desapareciendo uno tras otro y con ellos desaparece su testimonio. La memoria popular se pierde o se embalsama en los archivos. "No esperes lágrimas del ojo del muerto", dice un proverbio de Asia Menor.
Me he dejado cautivar por la memoria de los vivos. He escuchado con amor y compasión sus corazones. En ellos tienen depositados sus recuerdos como si fueran ramos y coronas pascuales en un iconostasio.
Detrás de Manolis Axiotis, el principal narrador del libro, se esconde un campesino de Asia Menor que conoció los batallones de trabajo entre 1914 y 1918, que más tarde vistió el uniforme griego, que vivió el Desastre de 1922, sufrió cautiverio y conoció la cruda vida de un refugiado para luego pasarse cuarenta años de estibador y sindicalista, además de haber combatido en la resistencia contra la ocupación alemana.
Ya jubilado, vino a verme un día para entregarme un cuaderno con sus recuerdos. Se había sentado pacientemente a escribir con sus pocas letras todo lo que habían visto sus ojos durante más de sesenta años.
De testigos presenciales así obtuve el material que necesitaba para escribir esta novela y ello con el único propósito de recrear un mundo que se ha perdido para siempre. Para que los viejos no olviden. Para que los jóvenes se formen una opinión certera.

Γιάγκος  Ψαμαθιανός.   Σμυρνέικος  Μανες.   Amanés de Esmirna. Πόλη, 1910.

http://www.youtube.com/watch?NR=1&v=hbhmcEsOMAU&feature=endscreen


Narguilé, pipa de agua.
Rodas, 2013.

La novela está estructurada en cuatro partes Vida pacífica, Amelé Taburú, Llegan los griegos y El desastre, en 18 capítulos y 325 páginas. Más el prólogo citado con el que se abre la historia. Son muchas las citas que tenía apuntadas, no sé si me bastará con dos entradas.


Vida pacífica.

Cap. I.
- "... se comía un par de aceitunas, escupía el hueso y varias maldiciones para conjurar la mala suerte"
- "Oiga, madre, 'pa' ya sé lo que quiere decir, pero 'ternoster' no lo acabo de entender"
- "También había bulla y jolgorio en el pueblo el día de San Juan Teólogo. Era la fiesta de la hombría." (20)
- Kirkika, el pueblo. "Bajo los árboles se bailaban karsilamases, jasápikos y zeybékikos" (Pág. 20)
- "Cerca del pueblo estaban las famosas ruinas de Éfeso, que, a decir verdad, nos traían bastante sin cuidado" (21)
- El maestro en Éfeso. "De cualquier piedra que levantaras te endilgaba una historia. Con los ojos y los oídos abiertos de par en par, yo sorbía todo aquello,que era la primera vez que oía, y me lo aprendí de memoria como el paternóster" (22)
- Los kirlies (aparceros de Konya). "Trabajaban tan duro como un tractor de hoy en día"
- " 'Y llegará el final de los tiempos... Y resucitará el Rey de mármol', nos arengaban los popes, y todavía ardíamos más en deseos de unirnos a Grecia." (24). El Rey de mármol es el último emperador de Bizancio, que perdió la Poli, Constantino Paleologo.

Cap. II.
- "Pero el amor no se puede disimular, es como la riqueza o como la tos, y aquello se acabó sabiendo." (36). Cita que me recordó otra de Atenaio: "Las dos únicas cosas que no pueden ocultarse son el amor y la tos."
Deli: prefijo turco de muchos apellidos griegos, significa 'loco'.
Hay docenas de nombres de pueblos greco-turcos y turcos, muchísimas expresiones en turco, nombres propios, etc.
Μαρικα Παπαγκικα.  Σμυρνέικο Μινόρε. 1919.

http://www.youtube.com/watch?v=hJBpjM9U1Ms

Cap. III.
- "Corría el mes de septiembre de 1910 cuando bajé por primera vez a Esmirna". (40)
Y mención a gran número de músicos y cantantes de la época, prácticamente desconocidos porque no existen registros discográficos de sus canciones, por ejemplo: "Katina, la cantante ciega, Mehmetaki, violinista turco, Yovanakis, mago del salterio." (54).
- "Pero la canción que encandiló a Süleiman Pachá, la cantó y la hizo suya toda Esmirna: Ay, Memó/ Dulce Memó/ Linda Memó...." (58). Se refiere al cantante Ogdondakis, llamado 'El ruiseñor de Oriente'. Había más de uno con ese mismo sobrenombre.

Cap. IV.
- "Con las Capitulaciones se hacen de oro, hijo mío. Esas sanguijuelas de europeos le están chupando la sangre a Turquía.". Nota al pie: Capitulaciones, "tratados que regulaban las prerrogativas de los extranjeros en el imperio otomano." (62) 
- Los Jóvenes Turcos. "Makedonya bizim! (¡Macedonia es nuestra!)..." (63)
- "Padre, ¿sabes quién ha puesto esa maldita octavilla en circulación por todo Oriente? [...]: ¡el Deutsche Palästinien Bank! Sí, señor, el Banco Alemán de Palestina. ¿Te das cuenta ahora?." (64). En esas octavillas se incitaba a la población turca al odio étnico y religioso, intentando sacar provecho económico del río revuelto.
-"No vendas espejos en el barrio de los ciegos, decía un sabio mendigo turco del que aprendí mucho bueno." (69)
- Mención a los Zeybekos, y en nota al pie: "Miembros de un cuerpo militar turco compuesto por griegos islamizados de Asia menor." (63). Estaban instalados en Estambul y el zeibékiko, un baile ritual, procede de ellos.

Ζεϊμπέκικο της Σμύρνης.  Zeibékiko de Esmirna.

http://www.youtube.com/watch?v=Ykbll7EA1vs

Foto (alterada), Marta Serrano. Detalle de la cubierta.

En efecto, es demasiado el material que tengo. Voy a dividir el trabajo en tres entradas para no alargarlas excesivamente. Empezaremos de ese modo la siguiente con el Amelé Taburú, los Batallones de Trabajo, que dan título al segundo capítulo general de la novela.

Ρόζα Εσκενάζυ.  Ο Τσακιτζής.

http://www.youtube.com/watch?v=O37Mhu2tbZw

Salud y buenas lecturas.

Ramiro Rodríguez Prada

P. D. La novela  Ματωμένα χώματαTierras de sangre, de Didó Sotiríu, la editó en Barcelona Narrativa del acantilado, en noviembre de 2002, traducida por César Montoliu, que recibió el premio Antonio Tovar de traducción (2001), de la Asociación Hispano-Helénica. Cubierta de Marta Serrano. Vale.

miércoles, 18 de junio de 2014

Llega la muerte


Galgo
Dibujo de  Rosendo García Ramos  Sendo.


Aprieta el culo y da pedal
(Viene la muerte)


Anda, ciclista,
aprieta el culo
que ya llegas 
a la meta.

Venga, flautista,
sopla con ganas
la flauta dulce
y dale caña.

Dale, bautista,
lávate el alma
y las heridas
y la pezuña.

Vamos, artista,
que no se diga,
al toro y suerte:
viene la muerte.

¡Ay, pensionista,
en esa lista
vas el primero,
no eres colista!

Anda, ciclista.
Venga, flautista.
Dale, bautista.
Vamos, artista.
¡Ay, pensionista!

Llega la muerte.

(Pálpitos y premoniciones: Si te dicen que caí)


De  Interrogatorios y Otras partidas perdidas.  2014.

Ramiro Rodríguez Prada


Chimo Bayo.  Ekstasi, eksta no.

http://www.youtube.com/watch?v=-EPi8V9Y5dk


Salud

lunes, 16 de junio de 2014

148


Más basura que cubo.



Salí a tirar la basura



cuando escuché el ruido lejano de los camiones de la recogida. Aunque me apuré como el día anterior, llegué dos segundos tarde, los operarios ya volvían con los cubos vacíos y el camión se disponía a arrancar. Uno de ellos dejó el montón de cubos en la acera y viendo que llegaba yo afogao, se adelantó y me cogió las bolsas de las manos con el camión ya rodando. ¡Gracias!, de dije poniendo en la palabra lo poco que me quedaba de alma después del apurón. Sólo me miró un segundo, pero me lo dijo todo, ¡Anda ya, pasmao, tuviste suerte! Un buen tipo.


Antonio Machado. Joan Manuel Serrat.  Autorretrato.


http://www.youtube.com/watch?v=T87uVKUUiI8



Salud y felices pesadillas.


ra

domingo, 15 de junio de 2014

Ο Θανάσης Παπακωνσταντίνου, Zanásis Papakonstantínu


Tsípuro de Tirnavos.


 Θανάσης Παπακωνσταντίνου

Ο ελάχιστος εαυτός 


Buenos días. Os traigo hoy a un músico de una generación más joven que la de la mayoría sobre los que he escrito en esta etiqueta. Se trata de Zanásis Papakonstantinu, nacido en 1.959 en Tyrnavos.

Cada vez que me enfrento a un nuevo capítulo de Música griega, me doy cuenta de la amplitud de ese enunciado y se me viene Grecia entera encima. ¿Cuántos años debería vivir para tratar, siquiera superficialmente, los pocos músicos que he escuchado y me gustan? Esta lentitud del trabajo y la escritura me exaspera.
A Zanásis lo he ido retrasando por distintas razones, entre otras por la poca información de que disponía, a pesar de tener ya casi medio centenar de canciones almacenadas y de ser uno de los que más he escuchado los últimos años. La información ahora sigue siendo escasa.

Abro este repaso completo a un disco suyo, con la canción que lo inicia, preciosa, delicadísima, donde el músico apenas hace uso de la voz, pero con una instrumentación de lujo, jasística y clásica, ese piano líquido, esa trompeta sonando como una llamada que se repetirá en el última tema del trabajo, también con toques de jazz, casi como un recuerdo...

Θανασης Παπακωνσταντινου - Loco-Motivo.


Por no bajar fotografías ajenas o subir alguna de la pésimas mías tomadas de la pantalla del ordenador, he decidido colgar dos del Tsípuro de Tirnavos, destilado muy parecido a nuestro aguardiente, famoso en todo el país y del que ya hablé aquí en Lo que se comió... , en honor a la tierra de nacimiento de Papakonstantinu.

Tyrnavos es tierra de mirmidones, de hormigas, μυρμήγκια, mirminguia, como me recordaba Ana Capsir no hace mucho, el gentilicio de Aquiles y sus compañeros, habitantes del reino de Peleo, el padre del héroe homérico. Está situado en el centro de la Grecia continental, en la Esterea Elada, pero junto a Lárisa, más cerca de la costa Egea y las Termópilas, que del Jónico.

La región, en las estribaciones meridionales de la cordillera del Olympo (2.920 m.), esta rodeada de montañas bravas, como deben ser los hombres que las habitan, a juzgar por la fiereza de su licor tradicional.

Θανάσης Παπακωνσταντίνου. Ο ελάχιστος εαυτός.


No es que Zanásis recuerde nada violento, ¿verdad?, todo lo contrario, puede resultar casi siempre melancólico y hasta depresivo. Un músico fino y delicado, amante de las melodías tristes y nostálgicas, dulces en general, aunque ni las letras de sus canciones ni sus composiciones musicales tengan nada de ñoñas, se trata de un músico arriesgado que deja mucho espacio al experimentalismo, a la sorpresa y hasta a la ruptura.
Siempre con un gusto exquisito, es otro trovador moderno, un poeta de la música.Ya lo iremos escuchando a lo largo del capítulo.

La dureza de su tierra y del tsípuro se le pegó a Papakonstantinu por otra vía diferente a la del montañismo o el alcoholismo.

En lugar de hablar de su vida y obra, y puesto que me faltan datos, he preferido traer a este primer capítulo más música que palabras. Escucharemos completo el último disco de Zanásis, Ο ελάχιστος εαυτός, ¿El ser mínimo?, del 2011. La anterior canción es la que da título al CD.

Θανασης Παπακωνσταντινου. Φωτης Σιωτας.  Ποιος Θα Με Θυμαται.


Pero no todos los temas son igual de lánguidos, hay varios más rockeros, como el anterior, donde canta Fotis Siotas. En el disco colaboran varios artistas.

Porque Zanásis, al fin y al cabo, también es de la generación del rockanroll, y aunque su música beba de la tradición, ha formado parte de la escena tesalonicense. Estudió ingeniería mecánica y grabó en el estudio de Nikos Papázoglu en Salónica, un lugar por donde pasaron la mayoría de los músicos que tenían algo que decir en Grecia desde los años ochenta, todos influenciados tanto por la tradición, como por la ruptura rockera de los sesenta y los setenta, esa otra forma, moderna, de la música popular.

Su primer trabajo discográfico, producido por Papásoglu, Αγία Νοσταλγία, Santa Nostalgia, es de 1993.
He querido respetar el orden de las canciones tal como aparecen en el disco porque tengo las doce que lo componen.
Θανάσης Παπακωνσταντίνου.  San Michele.

https://www.youtube.com/watch?v=f-qeuXD772M

No puedo evitar recordar a Nikolas Ásimos cuando escucho esta canción, la escupidera de Bakunin..., aunque,  mucho más elaborada, no tenga que ver con las de Nikos. Quizá la voz, como un mantra, la sencillez, o el soniquete de recitador callejero, la música tristona y al tiempo algo volandera, con esos sonidos de acordeón, la poesía amarga, otra vez música de la calle.

El disco del que tratamos hoy, Ο ελάχιστος εαυτός, (2011), tiene doce canciones. Los cuatro temas más rockeros, y también los que menos me gustan, tengo que decirlo, están interpretados por otras voces, Fotis Siotas y Orfeas Peridis. Aunque el estilo remita a una música más dura, para mí son composiciones más ligeras y convencionales, menos interesantes musicalmente hablando.

 Θανάσης Παπακωνσταντίνου, Ορφέας Περίδης.   Ανταρκτική.

ΤΣΊΠΟΥΡΟ ΤΥΡΝΑΒΟΥ. ΧΩΡΙΣ ΓΛΥΚΑΝΙΣΟ.
Tsípuro de Tirnavos. Sin anís.
Κατσαρος Κ. Νικολαος.

Aún así la segunda de Peridis, Omijli, Niebla, es otra de esas canciones preciosas que se adapta muy bien a la voz emotiva y aterciopelada de Peridis, la voz griega más parecida a nuestro Amancio Prada, pienso; es del tipo de temas que más me gustan de Papakonstantinu, y del propio Orfeas.

Y la segunda de Siotas, la que sigue, está a medio camino entre el estilo característico de Zanasis y el rock.

Los títulos de los temas son:
Loco-Motivo, Ο ελάχιστος εαυτός, Ποιος Θα Με Θυμαται, San MicheleΑνταρκτική, Σαν παιδι, Του ερώτα και του θανάτου, Ομιχλη, Ερωτηση Κρισεως, Σιμούν, Φέγγαρος, Τα τραγούδια που έγραψα.

Θανάσης Παπακωνσταντίνου. Φωτης Σιωτας.   Σαν παιδι.

https://www.youtube.com/watch?v=OgZW1aMLhbk

La siguiente es otra de ésas que me gustan de Zanásis, otra vez Ásimos en la memoria, sin que sepa muy bien por qué, esa voz medio desafinada que nos canturrea cercana, la sencillez aparente del tema, otra de las constantes de muchas canciones de Zanásis, que sin embargo no son nada simples, con arreglos instrumentales, ya sutiles ya lujosos, que acompañan como sin querer, pero de modo rico y sabio, melodías muy simples.

Y el título del poema de María Mutsáki, Del amor y la muerte, es de ésos a los que no hace falta añadir ningún comentario.
Μαρία Μουτσάκη, letra. Θανάσης Παπακωνσταντίνου, música. 
Του ερώτα και του θανάτου.

https://www.youtube.com/watch?v=pXhP6H7Kq_8

Son muchos los músicos con los que ha trabajado Papakonstantinu: Nikos Papázoglu, Orfeas Peridis, Sokratis Málamas, Lizeta Kalimeri, Marza Fritsila, Fotis Siotas, Giannis Agelakas, Melina Kaná... .

Recuerdo y me gusta especialmente Fairuz, que escuché la primera vez en la voz de Kaná, preciosa canción que ya he subido al blog un par de veces. De Zanasis he puesto varios temas además de ése, hay grabaciones en directo muy buenas, con su laúd o una especie de boulgarí con aspecto aún más oriental, a través de los que consigue sonidos más graves y elegantes que los comunes del buzuki, dentro de esquemas que recuerdan la música religiosa y bizantina.

Creo que Zanásis tuvo también su taller de construcción de instrumentos tradicionales griegos, como los cretenses de Laberinto pero más modesto. No me extrañaría que así fuera, dadas sus preferencias por los sonidos dulces del Oriente, su buen gusto y su condición de griego levantino, aunque no asiático, criado en el caldo musical tesalonicense

Θανάσης Παπακωνσταντίνου. Ορφέας Περίδης.  Ομιχλη.  Niebla.

https://www.youtube.com/watch?v=IW4nCvQb_vw

Muchos de los comienzos de sus canciones son sorpresivos, como sus originales adornos tímbricos, que van desde la psicodelia a la música descriptiva, pasando por el sinfonismo, la música clasica o el jazz.

El me cago en el fascismo, que canta en el tema siguiente, el mensaje, o la interpretación y la sencillez, de nuevo me remiten a Ásimos, y perdón por la reiteración ya que no puedo explicar como quisiera esta relación que a mí me parece sin embargo evidente. Hay desde luego humor en este tema, al que tan aficionado era también Nikolas, crítica política y hasta charanga callejera, lugares comunes de Ásimos.

Y en la voz grave algún eco también de Málamas, más evidente en otras canciones. Pero sigue siendo el Zanásis Papakonstantinu próximo, que nos canta al oído.

Θανάσης Παπακωνσταντίνου.  Ερωτηση Κρισεως.

https://www.youtube.com/watch?v=qxPZvqbPDc8

Repito, los temas donde canta él solo, las canciones que se ha reservado para sí, me parecen francamente mejores que el resto, aún aceptando que algunas apenas tienen adornos o éstos aparecen como esbozados tímidamente, impresión engañosa, están ahí para completar con detalles de elegancia las canciones, por mucho que lo hagan acompañando en un segundo plano.

Intimista y tierno sí, pero sin conformismos, ni en sus textos, en sus melodías, en la rica instrumentación pero sin mucho aparataje, ni en los arreglos. Preciosas canciones. Las tres últimas son de las suyas al completo.

Θανάσης Παπακωνσταντίνου.  Σιμούν.

https://www.youtube.com/watch?v=1evtyKg5KSg

La trompeta de la Curruca versicolor.
Llanera. Astutias 2013.

Cuenta con una docena de discos personales en su haber, algunos al alimón con los músicos ya citados. Con Melina Kaná y Sokratis Málamas, Στην Ανδρομέδα και στη γη, su segundo registro, en el 95, y con Melina otra vez al año siguiente, Της Αγάπης Γερακάρης
En 1.998 de nuevo con Kaná, y acompañados por Ashgabat, grupo de Turkmenistán, Λάφυρα. O como en este Ο ελάχιστος εαυτός, que escuchamos hoy, su último disco que yo sepa, de 2011, donde intervienen Siotas y Peridis.

Hablé antes de Fairuz, una canción de Zanásis Papakonstantinu que dio a conocer Melina Kaná y que me gusta mucho. Pero con ella tiene otras muy guapas y conocidas, Milo gia sena, Ta lafira tis nijtas, o Alexandra. O con Sokrátis Málamas, Faltsos Jrismos, Na rotas...

Esto se acaba. ¿Qué añadir? Está casado y tiene dos hijos. Vive en Lárisa..., pero sobre todo tenemos su música. Leí que algunos de sus temas más tradicionales, le vienen de escuchar las canciones que cantaban sus padres, agricultores. Ahí lo dejo.

Θανάσης Παπακωνσταντίνου. Φέγγαρος.

https://www.youtube.com/watch?v=aVqxetFHHyY

Nanourisma, Nana, (2002), que aparecería en un film de Nikos Grammatikos, O Vasiliás, El Rey, fue su primer éxito.

Extraordinarios temas, como los dos últimos de este CD de hoy, donde siempre nos aguardan las sorpresas, brillantes, originales, tal como nos tiene acostumbrados, en su instrumentación, en la ejecución, donde se mezclan el jazz, la música repetitiva de la Nueva Era, el Minimal, la clásica o los aires melancólicos orientales. ¡Una delicia musical, vamos!

La última canción, muy experimental, es de las más potentes, y a mí es en ésta donde su voz me recuerda más que en otras la preciosa voz de Málamas. ¡Ay, esa trompeta, curruca!...

Θανάσης Παπακωνσταντίνου.  Τα τραγούδια που έγραψα.

https://www.youtube.com/watch?v=kTx4pXxIJHo


Salud y buena música


Barbarómiros

viernes, 13 de junio de 2014

147


La mierda  no espera.


Salí a tirar la basura



mientras sonaba el teléfono en la sala. Me detuve en la puerta pensando qué hacer. Era una hora intempestiva para llamar a una casa con niños, aunque hoy estaba solo y dudo que eso lo supiera el que llamaba. Pero, más que nada, el culo de las bolsas que llevaba estaba sucio y no tenía dónde posarlas sin pringar algo. Hay un buzón de voz, ¡Que dejen el mensaje o que llamen otra vez si es algo urgente!, pensé. Así que, después de unos segundos de indecisión, seguí adelante. Fueron los que me faltaron para llegar a tiempo, porque el camión de la recogida acababa de pasar y vaciaban ya los cubos de la finca de más arriba. Son apenas cincuenta metros con una pequeña subida, corriendo y dándoles una voz quizá los alcanzara todavía. Pero andan ligeros y mis pulmones no resisten semejante esfuerzo. Reculé pensando en toda la parentela paterna del inoportuno telefonista. No había mensaje ni hubo más llamadas. ¿Cobrarán algún plus de nocturnidad estos tocapelotas por joder al prójimo a esas horas, o tendrán que poner también la cama?



Dr Hook & The Medicine Show.   Penicillin Penny.




Salud y felices pesadillas.


ra

miércoles, 11 de junio de 2014

Μανούρι, Manoúri, queso macedonio


El queso macedonio, Μανούρι,  Manúri.


Μανούρι


Buenos días. Como no acabo de atreverme de nuevo con las loukumades después del fiasco de diciembre pasado, voy a dedicar un capítulo a otro de los quesos griegos protegidos por una denominación de origen y consumido sobre todo en el centro y norte de Grecia, el Μανούρι (pro. Manúri), aunque tengo entendido que también lo hacen en Creta. Pero es un queso tradicional de Macedonia y Tracia, donde se fabrica artesanalmente con leches de la región.
Recibió su denominación de origen, que lo protege y distingue de quesos similares, al tiempo que regula su factura y composición, y fiscaliza la producción, en 1996.

El otro motivo de elegir al Manouri, es su cercanía semántica con el anterior queso traído aquí, el Manouli de Cárpatos. La gran diferencia con el karpáciko es su contenido en agua, mayor en el caso que nos ocupa, pues el Manuri es un queso que conserva parte del suero y al que en principio no se le añade sal. Es decir, es más húmedo, blando, dulce y fresco. Un queso mantecoso que puede servir para untar, algo más compacto sin embargo que el típico requesón.

Para su elaboración se calienta la leche después del filtrado, de cabra o de cabra y oveja, con el suero, y en
el proceso pierde gran parte de la caseína, como en el caso de la ricotta italiana, aunque conserva la albúmina, por lo que es un queso que puede ser consumido también por personas con intolerancia láctea.
Al tiempo que escurre el suero restante y se enfría la pasta, se prepara en bolas, tortas como la de la imagen de hoy, en cilindros semejantes a los nuestros de Pata de mulo o al queso palentino de Villalón de Campos, de unos diez o doce centímetros de diámetro, en distintos tamaños hasta un peso máximo de un kilo.
Θανάσης Παπακωνσταντίνου.   Απόψε.

https://www.youtube.com/watch?v=bTZKrHSijyE

Torta de Manuri,  Μανούρι.

Del Manuri se aprovecha todo porque carece de corteza, otra característica común a la mayoría de los frescos. Su textura es suave, muy blanda y sin agujeros, pero de masa algo compactada, no tan grumosa como la de los requesones, ni tampoco uniforme y de corte recto y limpio como el Pata de mulo. Es un intermedio y desde luego más sabroso que la mayoría de los sosos.

Delicado al paladar, si no dulce, nada ácido, dicen que con sabor a limón aunque yo no lo capté. Lo que si he notado es una delicada fragancia que no siempre está presente en los quesos de cabra u oveja. Supongo que al consumirlo verdaderamente fresco, sin el envasado industrial, resaltará más ese aroma y el leve gusto a limón, que se me escapó.

En realidad se trata de otro de los típicos quesos frescos griegos sin sal, algo más compacto que el Mizitra cretense o, en todo caso, con tiempos de secado más largos que éste. Con el añadido de distintas cantidades de sal en el proceso de maduración inicial, según la costumbre, con vistas a alargar su vida, y más tiempo de curación, el queso llega a distinguirse poco de un feta normal. Pero como queso fresco tiene una vida corta y enseguida coge acidez, lógicamente.

Estos días había estado preparando un capítulo en Música griega dedicado a Zanásis Papakonstantinou, que nació en Tyrnavos, famoso por su tsípuro, cerca y al norte de Lárissa, capital de Tesalia central, una de las de las regiones más ricas en variedades de Manuri.
Zanásis me ha venido al pelo para ilustrar esta entrada porque me gusta mucho y es uno de los músicos que tenía reservados en esa etiqueta musical.

Θανάσης Παπακωνσταντίνου.  Αποσπερίτης.

https://www.youtube.com/watch?v=Lzu7F6UZ53s

El corte grumoso y tierno del Manuri.

Muy blanco y cremoso, de gusto fino y sutil, no es sin embargo el Manuri un queso que acompañe bien al tsipuro, un orujo potente que gusta de quesos más fuertes, salados y con más curación. Cualquier feta por ejemplo, entre los frescos, sería más apropiado.
Se usa en cambio, por sus cualidades, como queso suave de mesa y, algo más curado, con un punto de sal y menos frecuencia, en ensaladas. Se puede añadir a platos más elaborados. Pero también se utiliza
mucho en postres, cremas, rellenos de hojaldre, como tirópitas y espanakopitas, o de pan, tirópsomo. Recordad que es prefijo, Tir-í, es queso en griego. Y para acompañar a mermeladas, dulces de fruta, o miel, sola o con frutos secos, en particular nueces.

En una página, de factura francesa creo, aconsejaban hasta el vino con el que maridarlo. Esto también será cosa del gusto personal y del bolsillo, pero de todos modos apuntaré las uvas que mejor lo acompañan, para los sibaritas que dispongan de unos euros extra. Son la Sauvignon Blanc o Pinot Gris. Yo lo disfruté con caldos más corrientes, los que había disponibles, aunque es cierto que siempre blancos.

A pesar de recibir su denominación oficial  muy tardíamente, es un queso conocido ya desde el siglo XIX, pero muy probablemente mucho más antiguo, de la estirpe de otros quesos tradicionales presentes en los Balcanes, las islas e incluso Asia Menor, de características diferentes dependiendo de la región. Pero siempre de cabra, oveja o mezcla de las dos leches.

Θανάσης Παπακωνσταντίνου.   Αερικό.

https://www.youtube.com/watch?v=0daJ3PsOI2I


Salud y buen apetito.


Ramiro Rodríguez Prada, Barbarómiros

lunes, 9 de junio de 2014

146


Haciendo el pino.



Salí a tirar la basura



como casi siempre, tarde y casi mal. Esos casis no me los dicta el optimismo, si bien cierto es que, mientras siga saliendo, tal vez tenga la ocasión de hacerlo casi bien un día.



The Beatles.   Come together.


http://www.youtube.com/watch?v=OEo9Bh679wM



Salud y felices pesadillas.


ra


domingo, 8 de junio de 2014

Η Λέρος, Leros


Higos de Agi Apostoli. Eubea.
Grecia 2012.


Λέρος


Buenos días. Así, con higos, nos recibió Leros cuando estuvimos, allá por los primeros noventa. Veníamos en una visita de un día desde Emboriós, al noroeste de Kálymnos, unas veinte personas en un pequeño kaíki. Atracamos en Agía Marina, Αγία Μαρίνα, y un grupo de viajeros alquiló motos y bicicletas, mientras el resto subíamos caminando hasta Lakkí, Λακκί, el puerto más importante de la isla, por donde volveríamos a pasar una semana después, rumbo a Lipsi, Patmos y Samos.

Antes de llegar a Plátanos, Πλάτανος, una especie de barrio que ejerce de Ayuntamiento, subiendo la colina al sur de Ag. Marina, hay una fuente encalada preciosa con agua abundante, fresca y rica, de varios caños si la memoria me es fiel; íbamos todos echando el bofe porque calentaba Lorenzo como nunca y, mientras hacíamos cola para beber, una señora mayor de negro riguroso nos dio, con una sonrisa, dos puñados de higos recién cogidos del árbol. No sé qué criterio la guió para ofrecernos los frutos sólo a nosotros. En el grupo había también italianos, morenos y no muy altos, aunque la mayoría eran nórdicos. Creo que nos vio pinta de más ruinucos y necesitados que al resto, ¿más griegos?. El caso es que, de alguna forma, nos sentimos distinguidos y Leros ya nos había ganado con ese gesto amable. Ni que decir tiene que la dulzura de los higos ayudó y la belleza de la isla hizo el resto.

3o συνέδριο φεστιβάλ παραδοσιακης δωδεκανησιακης μουσικης για νεους. Η γυναίκα στη μουσικοχορευτικη παράδοση της Δωδεκανήσου. Σεπτεμβρίου 2011. Λέρος.
Βιολί, Σάββας Γιαννούκας. Λαούτο, Σταυρος Ρούσσης y Γιώργος Δράκος.

https://www.youtube.com/watch?v=IQGVNaT5o3M

Por eso cada vez que recuerdo lo que L. Durrell escribió sobre Leros en su Venus marina..., me reafirmo en mis opiniones negativas sobre el inglés.
Llega un día lluvioso, frío y gris, recién acabada la 2ª Guerra Mundial, a un a isla en ruinas que ha sido, después de Creta, la más castigada por los bombardeos alemanes, en cuyas bahías convertidas en cementerios marinos, los Stukas hundieron varios barcos, y finalmente ocupada militarmente con lanzamiento de paracaidistas y varios días de dura batalla. Pero antes de la derrota italiana en septiembre del 43, había sido bombardeada también por la RAF británica, que buscaba dañar la flota italiana fondeada en la isla.
El inglés no le ahorra su desprecio, sus opiniones son crueles e injustas, ¡pasó el día metido en una taberna por culpa del tiempo jugando al ventiuno!, ¿cómo coño se permite juzgar a sus habitantes o a una isla que apenas pudo ver?

Algunas joyas del amigo:
En Leros uno parece estar siempre detenido por el mal tiempo... (así empieza), Es una maldita isla sin carácter..., Una melancolía miasmática pende sobre todas las cosas..., Dios ayude a los que nacieron aquí, murmura uno, a los que viven aquí y a los que vienen aquí a morir..., El agua es salobre... como los sentimientos de sus habitantes..., Y Leros todavía significa suciedad, incluso hoy en día.

Pero me refiero hoy a Durrell, sobre todo, por lo que relata a continuación, que tiene más sabor que sus caprichosas opiniones personales sobre una u otra isla. Se pone en contacto con el agente encargado de distribuir el diario que las autoridades inglesas que administran el Dodecaneso quieren impulsar, y del que Lawrence es el responsable. Y habla de la escasez de papel en aquellos primeros años de posguerra:

Una de las anomalías de la guerra consiste en que el diario que vendemos a un penique vale dos peniques como papel de envolver, y en Rodas nuestros ingresos por los ejemplares inservibles son ya mayores que los ingresos por ventas comunes. En cierto modo eso sitúa al periodismo en su perspectiva correcta. Entretanto me complazco en pensar que los habitantes de esos atolones se abonan a mi periódico nada más que para envolver pescado con él.

Y ya casi sin querer me metí de lleno en el tema de la guerra, sin haber hablado apenas de la isla. Lo haré después.
La llamada Batalla de Leros fue una de las más importantes de la guerra en el Egeo, a finales del 43, después de la capitulación de Italia. Y una de las últimas victorias alemanas. La isla, abandonada ya por las tropas americanas que se concentraron en la campaña previa de Sicilia, estaba defendida por los italianos que se habían sumado a los aliados, algunas fuerzas inglesas y los isleños. Fue bombardeada desde septiembre hasta noviembre, cuando cayó.

Los alemanes, en un ataque combinado por tierra, mar y aire, desembarcaron en la isla y lanzaron sobre ella oleadas de paracaidistas, mientras bombardeaban y ametrallaban desde el aire los puertos y los puntos estratégicos ocupados por los defensores. El siguiente vídeo propagandista nazi habla de la operación Leopard, aunque yo había leído que se llamó Taifun, Tifón.

El asalto a Leros por los alemanes. Operación Leopard.  Noviembre 1943.


Hundieron el buque insignia de la marina griega, Βασίλισσα Όλγα, Reina Olga, y el inglés Intrepid, entre otros anclados en la bahía de Portolongo (Lakki), que entonces todavía llevaba el nombre de la ciudad que los fascistas italianos habían construido desde que ocupaban la isla y el Archipiélago, 1912, tras la guerra italoturca.

La razón de este ensañamiento con Leros hay que buscarla en sus especiales condiciones geográficas, ellas determinaron que fuera usada a lo largo de la historia, desde la Guerra del Peloponeso que se sepa, como base de distintas flotas. La isla dispone de un montón de abrigadas bahías y la de Lakkí, es al parecer el puerto natural con más calado de toda la costa oriental mediterránea. Esto, y su situación junto a Asia Menor y en una zona intermedia del Egeo, la convertían en un lugar estratégico que todos las armadas aprovecharon.

Esta batalla sería la que inspiró la novela y la película Los cañones de Navarone que, como ya comenté en otros capítulos, fue rodada sobre todo en Lindos, Rodas.

66 aniversario de la unión del Dodecaneso a Grecia, en marzo de 1948.
Πανελλήνια Ένωση Λερίων  Η Παναγιά του Κάστρου, baile. 
Κώστας Κίκιλης, violín. Γιώργος Παπαϊωάννου, laúd.

Buganvilia.  Dodecaneso.
Grecia, verano 2013.

En Rodas hay muchas buganvilias, en todo el archipiélago en realidad, capricho de los italianos, pero Leros está lleno de ellas y son espectaculares, y ya empiezan a olerse más jazmines que en el sur, será en Samos, Hios... donde su olor dulce se imponga sobre otros.

Lakkí es un raro calamar en una frutería. No soy quien a describirla, como diría un gallego, porque no siendo lo peor del racionalismo arquitectónico italiano que impulsó el fascismo, es sin embargo un invento de locos en una isla griega como Leros, luminosa, colorista, salpicada de iglesias y capillas blancas, de casitas encaladas, escaleras, y estrechas y empinadas callejuelas.

Claro que también hay grandes mansiones repartidas por la isla, en especial en la franja central más habitada, y no sólo en Lakkí, pero la extrañeza surge de la acumulación de aparatosos edificios en grandes calles rectilíneas, muchos en franco deterioro, de colores apagados, sienas, ocres, cremas, en una ciudad completa de nueva planta levantada a golpe de grandonismo fascista, siguiendo el sueño imperial de Musolini que quiso construir allí una especie de balneario dorado en el Oriente, porque consideraba a Leros, y a esa bahía en concreto, como el gendarme del Egeo y sus tierras. Y todo ello en una isla como la mayoría de las del Dodecaneso, solar y humilde, pequeña y montañosa, aunque su altura máxima alcance tan sólo los 320 metros.

Me imagino a los tres amiguetes, al anfitrión, el Duce Benito con sus colegas, el Führer Adolfo y el Caudillo Francisco, departiendo en unas tumbonas de su villa veraniega sobre el justo reparto del mundo, con las camisas nuevas, cara al sol salir...
La pesadilla de Benito llegó al punto de pretender que los isleños aprendieran italiano, eliminando de paso las instituciones griegas, que permanecían en todo el Archipiélago como en Leros, pese a la ocupación. ¡Ni los turcos se atrevieron a tanto!, al contrario, la mayoría nunca conoció más libertad y menos impuestos que con ellos.

No hay mal que por bien no venga y algunos de esos grandilocuentes edificios sirvieron para albergar, más adelante, oficinas gubernamentales, que dieron trabajo a mucha gente de Leros y contuvieron un poco la emigración (En los años 20, después del desastre de Asia Menor, llegó a tener 30.000 habitantes).
La isla se precia también de ser una de las más ricas de Grecia. Bien es verdad que nadie se apiadó de ella y con el lote fascista llegaron otros palos para completar su retrato de isla maldita. Los antiguos cuarteles italianos y varios edificios, fueron también campos de concentración y detención domiciliaria para presos políticos durante la Dictadura de los Cogoneles.

Πάυλος Κουρούνης. Καλυμνικα.   Ισσος Λερικος.

https://www.youtube.com/watch?v=zTNmExy69Dc

Y el remate fue la instalación en la isla del mayor centro psiquiátrico del país, el Ψυχιατρικό Νοσοκοµείο Λέρου. El criterio de selección de los enfermos de toda Grecia que recalaron allí, era el abandono de sus propios familiares en el continente, cuantas menos visitas recibían más posibilidades tenían de acabar en Leros, donde la oportunidad de un contacto era ya prácticamente nula.

La dotación profesional para unos 3.000 enfermos era de mil personas sin apenas formación y ¡sólo dos psiquiatras! Teniendo en cuenta que la isla tiene unos 8.000 habitantes, uno de cada ocho trabajaba en el hospital.
En los ochenta hubo un escándalo por malversación de fondos y abandono de los ingresados y el gobierno griego intentó poner remedio. He leído que los problemas seguían todavía en los noventa, y no quiero pensar lo que habrá pasado en el último lustro de crisis económica. Sin quitarle responsabilidad a los griegos, ahí tendrían mucho que decir también los países ricos, tan cínicamente humanos, que están ahogando a Grecia, ¡y a nosotros!

Leros duplica su población durante el verano porque a partir de los noventa el turismo ha ido en aumento y hoy representa la industria más importante tras los beneficios derivados de los puestos de trabajo estatales.
Sus numerosas islas y resguardadas bahías son el refugio de muchos aficionados a la vela, y los caiques turísticos llegan cada mañana de Turquía, Kálimnos y Cos, tanto a Lakkí como a Ag. Marina.
Al norte tiene las islas deshabitadas de Aspronisiá, Arcangelos, Tripiti y Stroggilí. Pero tiene varias habitadas, Léviza, 8 personas y Kínaros, 2. Más los islotes, entre ellos, al este, Agía Kiriakí, Piganoussa, y al sur Velona. Y Mavra, Glaros, Plaka, Megalo Livadi...

Las bahías más importantes son la de Blefouti y Parzeni, al norte, en cuyo borde se sitúa el aeropuerto, las dos ideales para el fondeo con pequeños puertos, como la de Xirokampos, al sur. La más grande, Lakkí, entra hasta el centro de la isla desde el suroeste, con el puerto más activo de Leros. Drymonas, al oeste, tiene también un puertín muy recogido. Y al este la de Ag. Marina, Vromolizos y Pandeli con sus respectivos amarraderos.

A unas seis millas al este y a cuatro de la costa turca está Farmakonisi, la más poblada de las islas pequeñas, con unos 80 habitantes. La islita es famosa porque aquí fue donde los piratas mantuvieron preso 38 días a un joven Julio César que navegaba hacia Anatolia, según relato de Plutarco. Julio, gran vanidoso, hizo que aumentaran la cantidad del rescate pedido, dada su importancia, pero también prometió volver para vengarse. A los piratas les debió parecer un fanfarrón imberbe, pero erraron, y eso que ya habían cobrado el rescate que demostraba que no era un farolero y cumplía.Ya libre, regresó con barcos, los capturó y los mandó crucificar.

Μορφωτικός & Πολιτιστικός Σύλλογος Νέων Λερου η Αρτεμις.
Ioannis Mavridis y Antonis Dallaris.   Χαβας του Νισυριου. Λέρος.

https://www.youtube.com/watch?v=ki6zb2oCp2Q

Hacia Kálymnos y Leros desde Limnionas. Cos.
Grecia, julio 2013.

De la historia de Leros, repetir lo ya dicho sobre las compañeras. Salvo algún período bajo la férula de Samos, corrió la misma suerte que el resto del Dodecaneso, siguiendo a Rodas. Atenienses y espartanos, griegos y romanos, bizantinos y latinos -genoveses y venecianos-, para terminar dominada por los Caballeros de San Juan y los otomanos, hasta la ocupación italiana en 1.912. En 1948, junto con el resto, pasó a formar parte de Grecia, después de tres años de administración británica al fin de la guerra, como ya he contado a propósito de todo el Archipiélago.

Además de la belleza de la bahía de Agía Marina, con el caserío al pie del mar y repartido por las laderas, lo primero que llama la atención al entrar en ella es la gran fortaleza levantada por los francos en el S. XI, sobre una colina.
Desde lo alto de la isla se ve casi todo el contorno, los montes de Anatolia y el rosario de islas circundantes, y es otra de las practicables a pie.
Tiene una agricultura escasa y de subsistencia, en cambio la pesca ocupa más espacio que en otras islas, parece que por las riqueza de los caladeros del entorno.

Λέρικη Σούστα. Sousta de Leros.

https://www.youtube.com/watch?v=9BHllW4g7x8

Después de Lakkí, bajamos hasta la doble bahía de Vromolizos y Pandeli, al este, donde comimos en una taberna a la orilla del mar, junto a las rocas. Serían sobre las dos de la tarde y hacía un calor sagrado. La playa de arena no estaba lejos, pero me bañé allí mismo entre las rocas de la orilla, frente a la mesa que ocupábamos en la terraza, mientras nos traían la comida. El agua estaba templada y transparente, limpísimo el fondo a unos cuatro metros, que se veía como pocas veces lo he visto en Grecia, y los he visto de verdad como el cristal líquido. Por ejemplo varios días de este año en Levkós de Cárpatos. 

La subida hasta Plátanos discurre entre hermosas casas con huertos y altos muros de piedra donde cuelgan algunas de la buganvilias más coloristas y pobladas de este mar. Tomamos unos cafés griegos en un par de antiguos kafeníos, grandes, sombríos y frescos, con cuatro paisanos jugando en silencio al tabli, cuyas fichas golpeando el tablero son a esas horas como la música interior de la siesta griega.
Hacia las cinco fuimos bajando poco a poco hasta Agía Marina y a las ocho ya estábamos de vuelta en Kálymnos.

Λέρος.   Γιαβρι.

https://www.youtube.com/watch?v=nulIVFgqR_E

Salud y buen rumbo.

Barbarómiros