jueves, 17 de julio de 2014

157


Tres gaiteros en sin gaita.
Asturies,  2013.


Sali a tirar la basura.



Había un cielo tan claro y luminoso que parecía de día, como instantes antes de una explosión, cuando vemos la luminosidad del estallido pero aún no nos ha llegado su sonido. Hasta los cubos, relucientes por los reflejos de las farolas, querían trascender su condición de contenedores de mierda volviéndose diáfanos y aéreos. El espectáculo era entre sobrecogedor y delirante. No había nadie en la calle con quién compartir aquella rareza. Me recogí en respetuoso silencio pensando si no serían cosas mías, olía como en la víspera de una catástrofe, a cera y a grisú.


Dark La eMe.   Nunca debisteis cerrarnos las minas.


http://www.youtube.com/watch?v=HEEVqr7wNNw


Salud y felices pesadillas


ra

martes, 15 de julio de 2014

156


El cartón en el azul,  por favor.


Salí a tirar la basura.



En un cubo inapropiado encontré un montón de libros viejos. Al primer vistazo lo vi. Era un título desconocido escrito por alguien con el mismo nombre y apellidos que yo. Lo cogí y en casa estuve indagando por la red. Era un anodino escritorín iberoamericano, lo que no es desdoro en absoluto, mas al contrario, pero desconocido para el gran público lector, si podemos fiarnos de las estadísticas, con otro par de obras en el mercado. El libro, además de carente de interés, no tenía distribución aquí, era una edición venal publicada por una editorial fantasma de su país. ¿Cómo había llegado hasta allí? ¿Alguien del portal me espiaba y quería enviarme un mensaje? ¿Para qué?, pensé, No sólo soy un desconocido para la mayoría de los vecinos, además vivo de incógnito. Al día siguiente lo dejé en el cubo del papel sin que nadie me viera, me daba no se qué, como si estuviera abandonando a Moisés, ya jubilado, a la orilla del Mar del Plata.


Roberto Goyeneche.  Cuando estemos viejos.


Salud y felices pesadillas.


ra

lunes, 14 de julio de 2014

Contadores a fecha 14 de julio


Oviedo.
Asturias, 2012.


1.789


Recibo una notificación de la compañía eléctrica en la que, resumiendo, me reclaman 1.789 euros por cuotas atrasadas y la morosidad añadida. Es de una casa en la que hace años que no vive nadie y que habría que rehabilitar. Manteníamos el mínimo de luz, unos 20 euros bimestrales, para enseñársela a los posibles compradores, ya que la hemos puesto a la venta. Teniendo en cuenta que hará unos cinco años que la heredamos, que los recibos están domiciliados y se han satisfecho religiosamente en tiempo, forma y cuantía, unos 400 euros en total según consta en el extracto bancario, el aviso me deja patidifuso. Se trata de un error, sin duda. Sabemos que pocas veces hacen la lectura real del contador, apuntan una cantidad aproximada que no sobrepase el mínimo contratado, ya que el consumo nunca lo alcanza. En alguna de las dos o tres lecturas anuales ponen la cifra real ajustándola a las anteriores. Alguien metió la pata en ese proceso. Cojo los papeles y me presento en las oficinas de la compañía. El hombre que me atiende me da la razón, pero me dice que vuelva mañana porque no está el jefe que se encarga de esos temas. Cuando el tipo me recibe al fin después de una semana, lo hace con esta joya, ¡Bufff !, lo mejor que puede hacer, si quiere que esto no se eternice, es satisfacer la deuda y después reclamar. ¿Qué deuda?, le contesto, incrédulo de que me pueda sugerir semejante cosa. Mire, dice el menda, ¿Se ha fijado en la cuantía?. ¿Por qué?.  ¡1.789!, ¿no le dice nada?. Sí, la Revolución Francesa. ¡Esta compañía tiene capital mayoritario francés!, me informa triunfal, pero en un susurro¿Ah, sí?, no estaba al tanto.  Aquí hay gato encerrado, murmuró. Yo ya no sabía si estaba en un negociado de la Eléctrica o en la oficina de la Agencia de Detectives Pinkerton. ¡Oiga, déjese de historias y tramite esto cuanto antes, por favor, la cosa está clara!, le dije visiblemente mosqueado. ¡Vale, vale, yo sólo le prevengo!, y añadió misterioso, Esto no es cómo empieza, es cómo termina... . Pasaron los meses. Ya dejamos muy atrás los siglos XIX y XX. Me han hipotecado la mísera pensión. Nos han cortado la luz y pronto se quedarán con la casa. Resumiendo, ¡Cuánta razón tenía aquel fulano!


Ramiro


Carles Santos.   To-ca-ti-co  To-ca-tá.


https://www.youtube.com/watch?v=NDlmqFwzr2c 


Salud

sábado, 12 de julio de 2014

Miedo y olvido


La casa del monte.



Diálogo por eliminación
(Desmemoria)


A.  Por qué motivo no llegamos a acercarnos. 

B.  No lo sé, porque nos puso en guardia.

A.  Todos sospechábamos algo grave.

B.  Pero fue él quien se ofreció a ir. 

A.  Algo pasaba, era extraña aquella quietud. 

B.  Y el silencio.

A.  Sí, el silencio, o la oscuridad. 

B.  No debimos dejar que fuera solo.

A.  Crees que los tres juntos hubiéramos evitado lo peor.

B.  Es posible, seis ojos ven más que dos. 

A.  Pero no sabemos lo que se encontró.

B.  Una encerrona, qué otra cosa pudo ser. 

A.  En la casa no hay nadie.

B.  De eso no estamos seguros.

A.  Creo que deberíamos inspeccionarla.

B.  No lo tengo claro.

A.  Temes algo.

B.  Es para temerlo.

A.  Hay que salir de dudas.

B.  A qué precio.

A.  Al que sea.

B. Yo no voy.

A. Cuatro ojos ven más que dos.

B.  Vete tú.

A.  Eso mismo dijiste la otra vez.

B.  No lo recuerdo.


Ramiro.


The Clash.  Brand New Cadillac.

http://www.youtube.com/watch?v=Z2WXlaWv2u0


Salud.

viernes, 11 de julio de 2014

155


¡¿Qué quiés que te diga?!...



Salí a tirar la basura



porque no valía pa otra cosa.



La Pandilla Voladora.   Todo me da igual.


http://www.youtube.com/watch?v=i1k0jgUpHEI



Salud y felices pesadillas.


ra