martes, 19 de febrero de 2013

Ο Νικόλας Άσιμος, Nikólas Ásimos


Plaka.  Atenas,  julio 2012

Ο Νικόλας Άσιμος


Nicolás Ásimos Assimópoulos nació en Tesalónica, 1949, pero porque su madre fue allí a dar a luz. Vivió su infancia y su adolescencia en Kosani, el pueblo de la familia, en cuyo instituto comenzó a mostrar ya su carácter inquieto y su afición a la lectura, la escritura y la música.

De una polémica en la prensa local en la que firmó Ásimos, le quedaría ya el pseudónimo por el que se le conoce.
Νικόλας Άσιμος.   Θα σου κλέψω το σακάκι. Te voy a robar la chaqueta.


Ásimos fue el cantante, actor, showman, el payaso más divertido y radical de cuantos vivieron los años de la dictadura de los cogoneles y los siguientes. Azote de fascistas y del propio sistema político heredero de la dictadura, la suya era una propuesta libertaria.

Sin embargo nunca aceptó el encasillamiento en unas siglas jerarquizadas o en una ideología partidista, aunque cualquiera que le eche la vista encima entenderá de qué pie cojea. Siempre trató de ser lo que parece, un ácrata, un hippie y un cachondo.

En el ´69, ya decidido por las letras, se fue a Salónica a estudiar filosofía. Allí tendría sus primeros contactos fuertes con la escena que, junto con la música y la escritura, ya no lo abandonaría hasta el momento de su trágica desaparición, a la edad de 38 años.

Nikolas Ásimos.  Eimaste Tromokrates. Somos terroristas.


Al tiempo que escribía y completaba su formación musical, participaba en talleres dramáticos. Interpretó varios papeles en grupos del teatro universitario, obras que ya tuvieron problemas con la censura del régimen.

Pero su destino artístico estaría ligado a la capital, y el año 73 allá se fue a seguir haciendo teatro y música.

Se ganaba la vida tocando en una taberna de Plaka, y en este tiempo estableció contacto con artistas conocidos, como Zuganelis o Katerina Gogou.
La actividad política y artística de Atenas en esos años era febril y él se entregó en cuerpo y alma a la causa, como en todo lo que emprendió.

Comenzó a grabar unas cintas de cassette que se vendían por las calles de mano en mano. Ésta sería su opus magna, y no es cachondeo el latinajo, porque la humildad de los medios que usó no le resta potencia al mensaje, con frecuencia lo intensifica. Y esa pobreza era deliberada, buscada por él.

Vivió casi todo el tiempo en Exargía, cerca de la Politécnica, la réplica ateniense del Barrio Latino parisiense, en bajos y sótanos baratos. Fue de hecho un precursor de los okupas.

N. Ásimos en  O Drakoulas ton Exargion (escena...)

Hoy comentaba con el mi Dimitraki esta escena donde parodian la película de Anguelopulos, Viaje a Cytera. Precisamente este fin de semana vimos en Gijón la versión subtitulada de La eternidad y un día, primera de un ciclo de cine griego que Céfiro, asociación asturiana de profesores de latín y griego, organiza desde hace dos años.
Siempre incómodo, con un estilo burlón, bufo, no admite tampoco el encasillamiento fácil, ni entre los payasos ni entre los cantantes. Era un francotirador, un provocador, en lo político y en lo artístico, sus estrambóticas puestas en escena callejeras se harían famosas.

Todo esto, y su actitud antiautoritaria, le llevaría a un sinfín de enfrentamientos y engarriadas con la policía, o a dificultades para grabar su música en unas condiciones técnicas adecuadas con una casa discográfica, con las que como es obvio también estaba en guerra y que rechazaban sus trabajos. Fue la mediación de un amigo la que le permitió grabar con Lyra.

En 1974 lanzó su primer disco, un sencillo titulado Ρωμιός Μηχανισμός, algo así como Mecanismo griego.

Todos los espectáculos y locales que montaba con sus camaradas se iban al garete, tenían un público escaso o eran clausurados por orden gubernativa. Ruina tras ruina, el camino del antihéroe...

Ο Νικόλας Άσιμος. En directo... 


Finalmente acertaron con uno que visitaban intelectuales, artistas, músicos y políticos del momento. Allí conoció a Zános Mikroútsikos, a María Dimitriadi o a Vassilis Papakonstantinou, el que sería uno de sus más fieles amigos hasta el final. Por allí pasó su ya colega Savópulos, o el comunista italiano Berlinguer...

Su inconformismo le llevó a reñir incluso con sus compañeros de farra comunera y vital. Aprovechando la buena racha, querían subir el precio de las consumiciones a lo que se negó Nikolas. No hubo acuerdo y se fue con la música a otra parte y su compañera embarazada, regresando a la necesidad y en ocasiones al hambre.

El año 76 nació su hija y, con todos los problemas que suponía la simple supervivencia, al año siguiente fue encarcelado una temporada junto con otros intelectuales y artistas opuestos a la dictadura. Una iniciativa promovida y encabezada por Dionysis Savvópoulos, les dio la libertad.

Y en el 78 se libró de la mili con un diagnóstico de psicosis esquizofrénica, después de fingir la demencia. ¿Qué haría un antimilitarista como él en el ejército?

Nikólas Ásimos.   Domatio sto Amsterdam.  Habitación en Amsterdam.


A principios de la década de los ochenta escribió un libro, titulado  Αναζητώντας Κροκάνθρωπους, Buscando a Krokánzropus?!, del que se repartieron unos cuantos ejemplares entre los amigos, en fotocopias, y que se distribuyó después gratis de mano en mano por las calles, como sus cintas.

No recuerdo qué personaje de la vida cultural helena, dijo de esta obra que nadie que la leyera podría ser después la misma persona. Y no se refería a eso de que cada segundo que pasa somos alguien distinto. Lo siento pero del libro sólo conozco el prólogo, también de Ásimos.

La obra se editó en forma de libro después de su muerte, no sé si contraviniendo los deseos del autor, que se oponía a su comercialización, tal como escribe él mismo. Tenía entendido que era una edición no comercial, otra vez para los amigos. Algo parecido a lo que sucedió, de nuevo, con sus cassettes.

En 1982 publicó su primer LP, el único, Ο Ξαναπές, término que, según apunte del mi Dimitraki, funciona como verbo sustantivado y podría ser traducido como "el que repite lo ya dicho o conocido", y que yo traduzco a mi aire por El cansino. En él colaboraron Vassilis Papakonstantinou y Haris Alexiou.
Y musicó el  Oυλαλούμ de Γιάννης Σκαρίμπας, Skaribas.

Ο Νικόλας Άσιμος.  Γιουσουρούμ.

http://www.youtube.com/watch?v=M19r61MkFsE

Yiusurúm, me comenta el monje tesalonicense, era el nombre de un judío que vendía antigüedades. Su nombre designa desde entonces al propio mercado, al lugar de venta.

Su trabajo musical más importante, lo he dicho, son las 8 cintas, ocho cassettes ilegales como le gustaba llamarlas a él, algunas triples, grabadas y puestas en circulación entre 1978 y 1987.
Los títulos van desde lo pintoresco, como  La picardía o El bígaro, a lo intraducible, pasando por el humor corrosivo y el absurdo. Todo ese material ya fue editado póstumamente.

En el 87 Papakonstantìnou incluyó cinco canciones suyas en el disco Χαιρετίσματα, Saludos. Y después de su muerte ha vuelto a recordar a su amigo en sus registros muchas veces.
Otra canción, Πάλι στην ξεφτίλα, apareció ese año en el disco Ήχοι του Χειμώνα, Los sonidos del invierno.
Ο Νικόλας Άσιμος.   Χαμογέλα. Sonríe.

Y ese mismo año, con Nikos muy enredado en sus particular viaje psicodélico, se vio envuelto en un oscuro episodio, con drogas de por medio, que terminó en una denuncia de agresión sexual a una chica. La acusación parece que se reveló falsa al final, pero el daño ya estaba hecho.

Fue ingresado en un hospital psiquiátrico con el mismo diagnóstico que lo había librado del servicio militar, pero esta vez fuertemente medicado y afectado por una depresión de la que ya no se pudo librar.

No estuvo mucho tiempo allí. Sólo muy poco después de abandonarlo, y tras escribir en esos días una especie de diario, su testamento y su despedida, en el que trataba de encontrar una razón para seguir viviendo, se ahorcó en la cocina de su casa.

Nikolas Ásimos.  Βαρέθηκα.  Cansado (Aburrido)

Πλακα,  Atenas, julio 2012

Cuando murió estaba preparando el lanzamiento de otro LP, que se editaría al año siguiente a título póstumo.
Se trata de Το Φανάρι του Διογένη,  La linterna de Diógenes, que recogía las grabaciones de sus ya legendarias cintas, en concreto de la Nº 8. En él intervino la cantante y actriz Sofía Leonardou, famosa por su participación en la cinta de Kostas Ferris, Rebétiko.

Μπαγάσας.  Bagasa.  Pillo.

http://www.youtube.com/watch?v=Sd9HXeb06D8


Yasu, Nikola, Μπαγάσα, eras un colega!


Μνήμη Νικόλα ΆσιμουEn memoria de Nicolás Ásimos.
Στίχοι, Μουσική, Βίντεο: Μίλτος Σαρηγιαννίδης.  Θαλασσινός. 2012.


Υγέια, Salud!

Ramiro Rodríguez Prada

2 comentarios:

  1. Me ha encantado tu reseña ... viví en Grecia por un año, y vuelvo siempre que tengo ocasión... allí descubría al gran Ásimos, Exargia, PLaka, el parque navarinou..... qué recuerdos, qué días y qué noches...Un abrazo

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    1. Efjaristó polí, file! ¡Qué suerte!, hablarás griego de corrido..., yo tengo que reunir mes a mes y entóncenes sí que pasé un par de años allí, pero hablo griego skiládiko, me da un poco de vergüenza confesarlo, es que soy muy vago para ciertas cosas, pero allí me encuentro en mi elemento, es el país de la comunicación no verbal, ¡con lo parcos que parecen y ese cacho lengua que tienen!, me refiero al idioma, claro... .
      ¡Tengo que tener algo de griego en algún sitio porque esto nun ye normal, es un cuelgue enorme!

      Nai, agkaliés kai filakia! Y salud.
      ramiro.

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