jueves, 10 de julio de 2014

Η Διδώ Σωτηρίου, Didó Sotiríu -3


Kos.
Grecia, 2013.

Ματωμένα χώματα -3
Tierras de sangre

El desastre

Cap. XV.
- "De pronto un rumor empezó a recorrer la trinchera. Más parecía el silbido de una víbora que una orden. Se detuvo sobre nuestros cuerpos y los paralizó en vez de liberarlos. ¡Retirada! ¡Retirada! ¡Retirada!" (Pág. 269)
- " '¡Se ha hundido el frente! ¡Estamos perdidos!' " (271)
- "Lo que ocurrió entonces es difícil de describir. Nadie se paró a pensar o a escuchar orden o consejo alguno. Se diría que llevaban meses preparados, esperando aquel momento para echar a correr. Cada uno por su lado, sin volverse siquiera a mirar a su hermano." (271)

Toda esta última parte de la novela es también un relato terrible, por la brutalidad de algunas escenas y la desesperación del momento. En la desbandada vuelven a producirse escenas de odio y violencia, pillaje, violaciones, asesinatos, no sólo contra la población turca sino entre los propios soldados, y contra los civiles griegos que huyen también hacia la costa mediterránea, temiendo las represalias turcas, cuyos guerrilleros hostigan ya la retaguardia en retirada del derrotado ejército griego.
- "Sólo se había detenido allí para rebuscar relojes y dinero en los cadáveres..." (273)
- "Por dondequiera que pasáramos, desolación. En los pueblos turcos, fuego, masacres, violaciones, saqueos." (275)
- "Me puse de nuevo en marcha. Ya no me daba miedo la muerte. Más bien eran los vivos los que me daban miedo, que habían perdido todo rastro de humanidad." (276)

- " 'Ahora nos reuniremos todos en Esmirna, nos embarcaremos para Samos, que está a un tiro de piedra, a esperar que pase la tormenta y luego volveremos a nuestra tierra?.' " (278).
Pero eso ya no sería posible...

La historia del abuelo que busca a su nieto, perdido después de un accidente en el tren donde viajaba con él,
con su abuela y con su madre, es de las más dramáticas del libro, enternecedora y dolorosa como pocas. Trágica de hecho.
- " 'Pobrecito mío, tu abuelito te está buscando. ¿Dónde te habías metido?' " (278)
- " '¡Vamos a buscar a mi madre, abuelito!'
'¡Vamos hijo, vamos!'
Unos que estuvieron escuchando la historia le gritaron: 'Oye, viejo, ¿has perdido la razón o qué? Os vais a perder tú y el niño'. '¡Que por ahí corren los guerrilleros de Pehlivan!'
¡Pero el viejo y el niño se dieron la vuelta y echaron a correr! La noche lo cubrió todo. ¡Aquel mundo no era obra de Dios! ¡No, no lo era! " (280)

Zülfü Livaneli.  Nefesim Nefesine.

http://www.youtube.com/watch?v=wJQ8FzAjzM8

Cap. XVI.
- "En cuanto puse el pie en Esmirna me paré a recobrar el aliento, me santigüé y me entró una repentina alegría. Los griegos siempre habían hallado cobijo y protección en Esmirna. Los turcos la llamaban 'gavur Izmir' (Esmirna la infiel) y para ellos era realmente la Infiel. Pero para nosotros era la alegre y hospitalaria capital del helenismo. Que olía a jazmín y anhelaba su libertad." (281)

- "¿Oyes lo que te digo? ¡Trikupis ha tomado el mando y ha pasado al ataque! ¿Lo sabías?" (284)
- "¿De qué Trikupis habla, abuelo? ¡A otro con ese cuento! A Trikupis lo han capturado junto a todo su ejército. Los mandamases de Atenas nos han dejado en la estacada y sólo Dios sabe lo que va a ser de nosotros. Y en cuanto a los ingleses no se engañe. Que ni a ellos, ni a los franceses, ni a los norteamericanos, ni a nadie de su calaña, pero es que a nadie le importamos un pito. ¡Son ellos los que nos han cavado la tumba! ¡A ver si se entera! " (284)

- "Lo vamos a dar todo por nuestras familias y por la libertad. Ha llegado la hora del deber..." (285)
- "Habría querido decirle: 'Sí que ha llegado, viejo, sí que ha llegado la hora del deber, pero esos malditos la han desperdiciado. Nos han arruinado mil y una traiciones, los intereses de los grandes, los pasos en falso de los políticos, los malos comienzos y peores finales..." (285-6)

Zülfü Livaneli.  Memik Oğlan.

http://www.youtube.com/watch?v=sZTVQ5nV9TI


Mezquita de la Logia.
Kos, 2013.
    
- " 'Abuelito -gritó el chaval con voz temblorosa-. ¡Que se va la armada!' "
'¿Qué armada, tontaina?'
'¡La armada griega!' "(288)
- "Luego ocurrió algo tan ruin que nos hizo recobrar el conocimiento. ¡Un buque de guerra francés, el 'Waldeck-Rousseau', empezó a tocar nuestro himno nacional! ¡Los aliados, tal como exigían las ordenanzas y el protocolo, saludaban al buque insignia griego que se hacía a la mar! 
Semejante afrenta desató la rabia." (289)
- "¡A casa del gobernador Steriadis!. [...] ¿Que se ha fugado?. [...] ¡Lo han salvado los ingleses! ¡Le han ayudado a huir!" (290)

- "Cuando cayó la noche, la calma volvió al muelle. Todo el mundo había encontrado cobijo y estaba a la espera de los acontecimientos. Sólo el miedo se paseaba por aquellas calles oscuras como un sereno que presagiaba el más terrible de los amaneceres que los griegos hayan conocido..." (290)

Σαν την Σμύρνης το Γιαγκινι.

http://www.youtube.com/watch?v=DVnBIfnATtA&list=RDmZLIwg2u4AQ

Cap. XVII.
Los dos últimos capítulos son también desgarradores, Axiotis, el protagonista encuentra a su madre y a un hermano, que ingenuamente piensan que nada va a pasar. La realidad los desengañará muy pronto. Las tropas de Atatürk están a las puertas de Esmirna. Las potencias extranjeras mantienen sus barcos en el puerto, enfrente de la ciudad, pero no intervendrán en defensa de una población civil que será masacrada a la vista de todos.

- "Me vestí de civil y me sentí como si volviera a nacer.
'Levantaos y vámonos al muelle -dije-. Es lo mejor que podemos hacer. Allí están las flotas extranjeras. Ellas nos protegerán'.
Encontramos un rincón en el Malecón justo enfrente de los buques de guerra y pasamos allí la noche, tiritando de frío y de angustia. Al amanecer desembarcaron unas patrullas inglesas a recoger a los miles de hombres, mujeres y niños que allí estábamos. Nos metieron en una sesenta barcazas que había en el puerto y nos remolcaron hasta sus navíos."

Pero no los embarcan en los navíos, los mantienen en las barcazas, casi como rehenes. No obstante a todos les pareció una señal del cielo. Sobre todo cuando vieron desde allí cómo Esmirna empezaba a arder, mientras miles de personas confluían desesperadas en el Malecón, perseguidas ya y asesinadas por los irregulares turcos. La gente se tiraba al mar huyendo y el agua estaba sembrada de cadáveres, los que lograban llegar a los barcos extranjeros eran obligados a soltarse y acababan ahogándose también. Mientras tanto, el espectáculo en el paseo de Esmirna era dantesco...
Son imágenes que los mismos occidentales rodaron desde sus barcos, para la historia -de la infamia, diría-, mientras alzaban el volumen de las marchas militares y canciones bullangueras que sonaban por los altavoces, para no escuchar los gritos desgarradores de los que estaban siendo asesinados.

- "Al anochecer los turcos dispararon varias veces en dirección a las barcazas"
- "Al amanecer llegaron unos remolcadores a llevarse las barcazas. No tardamos en darnos cuenta de que los remolcadores no eran ingleses, sino turcos." (302)
De nuevo la gente se tira al agua. "El mar se vistió de negro. [...] Se agarraban de los buque de guerra para salvarse y recibían a cambio agua hirviendo y garrotazos con bicheros y palos de madera." (303)
Amarran las barcazas a tierra y los tiene allí tres días. "Cada dos o tres horas irrumpían arrogantes los zeybekos con sus cintos colorados cargados de pistolas y alfanjes, y se llevaban consigo a la flor de la juventud. Cogían con sus manazas a los chicos más apetecibles y a las más guapas muchachas, se los llevaban detrás de la aduana, los violaban y luego los ejecutaban." (304)
Una vez en tierra, la gente se refugia en los cementerios, las escuelas, las iglesias, las fábricas. Hasta allí van a buscarlos los turcos para llevarse a los hombres. Nuestro protagonista y su hermano se despiden de su madre. "Kostas se echó a llorar, como si supiera que no iba a volver, como no volvió nuestro Stamatis...". (El hermano pequeño, también en el ejército griego) (307)

Ηλίας Κατσούλης. Παντελής Θαλασσινός.  Τα Σμυρνέικα τραγούδια.

http://www.youtube.com/watch?v=sUZlvQbNvPU

Balcón otomano.
Ciudad nueva de Rodas. 2013.

Cap. XVIII.
- "Formamos una columna, dos mil hombres, y echamos a andar hacia el cautiverio. [...] Pero las desgracias empezaron en las mismas calles de Esmirna. En cuanto nos pusimos en marcha, una muchedumbre enfurecida, sedienta de venganza, se abalanzó sobre nosotros con palos, piedras y barras de hierro."
- "Antes de que llegáramos a Basma Hane ya habían caído muertos cincuenta hombres. A los heridos los sacaban a rastras de la fila los propios guardianes..." (308)
- "Estuvimos andando tres días sin una sola gota de agua." (309)

Entre escenas de auténtico horror, separan a los dos hermanos, que ya nunca volverán a verse.
- "No alcanzamos a despedirnos. Lo seguí con la vista. Se perdió entre el gentío que se desparramaba como el fango por la carretera. Se los llevaban a Magnesia. Allí, durante los primeros días, ametrallaron en un barranco a cuarenta mil cautivos." (311).
A Manolis Axiotis lo envían, junto a otros 500 a la región de Aydín, su tierra y la de Didó Sotiríu. Hay otra escena terrible, de un niño a quien su padre, un clérigo musulmán, ordena degollar a un prisionero que violó a la madre. No he querido describir este y otros episodios, por no pisar los desenlaces de las historias, pero también por ahorraros hoy ese dolor, basta con leerlo una vez en el libro.

Cerca de Kirkika, su pueblo, ahora abandonado y en ruinas, consigue escapar con un amigo, "Conocíamos bien aquella región. Aquellas eran nuestras montañas." (316)
- "En cuanto nos acercamos a Kirkika no conseguíamos dominar la emoción. [...] Cada casa, cada calle, cada árbol y cada piedra de aquella tierra estaban indisolublemente unidos a nuestra alma y a nuestros recuerdos.
¡Nos echamos a llorar! " (316-7)
En el pueblo se aprovisionan y cogen unos odres con la intención de hincharlos y pasar a nado hasta Samos.
- "Entre Çagli y Samos hay una isla desierta. Si conseguíamos llegar allí sanos y salvos, luego era un salto hasta Samos. Haríamos señales a los pescadores." (318)
"Hinchamos a toda prisa los odres, pero, cuando íbamos a tirarnos al agua, a Panos le entró miedo. Era la primera vez que se metía en el mar. [...] Se me encogía el alma. [...] Panos se emocionó."
Intenta convencerlo, sin resultado, "Si encuentras una barca y puedes, ven por mí. [...] Comprendí que se había dado por vencido y que no me iba a seguir." (319)

El final no lo voy a desvelar tampoco, pero recogeré una última cita. Han sido tres entradas muy largas y dejaré para otra ocasión mi intención de referirme, algo más extensamente, a la biografía y al trabajo de Didó Sotiríu. He preferido, a cambio, rescatar el mayor número de citas que, como ya he repetido en cada ocasión, rompen el texto original, por completas que sean, y nunca podrán sustituir a una lectura del libro. Ésa es mi intención al menos, la lectura completa del original.

"Lo suyo es que hubieran mandado barcos a recoger a la gente para ponerla a salvo. Pero ni eso.
'Yo sé por qué. Me lo dijo un capitán. Por lo visto en El Pireo se llegaron a reunir noventa y dos barcos de gran calado dispuestos a hacerse a la mar para ir a Asia Menor a recoger a la gente. pero nada más zarpar recibieron un telegrama secreto del gobierno: 'Travesía facultativa, servicio discrecional. ¡Y de los noventa y dos barcos sólo emprendieron el rumbo diecisiete!' " (323-4)

- "¡Malditos sean los culpables!"

Σαββίνα Γιαννάτου. Primavera en Salonico.  Σμυρνέικο Μινόρε.


Salud y buena letra. 

Ramiro Rodríguez Prada


P. D. La novela  Ματωμένα χώματαTierras de sangre, de Didó Sotiríu, la editó en Barcelona  Narrativa del acantilado, en noviembre de 2002, traducida por César Montolíu, que recibió el premio Antonio Tovar
de traducción (2001), de la Asociación Hispano-Helénica. Cubierta de Marta Serrano. Vale.

miércoles, 9 de julio de 2014

154


Cada lechuza su agrópila.



Salía tirar la basura 



y en uno de los cubos había un arzobispo enterito, con la mitra puesta de espetón. Tenía la cara amoratada y los labios cianóticos, y no le cogía el pulso en la yugular donde, por cierto, se veían dos minúsculas incisiones como las que producirían los colmillos de un vampiro. Soy enemigo declarado de estos fantasmones, pero la enfermera que hay en mí se impuso de nuevo. Intenté sacarlo pero pesaba mucho, a sí que incliné el cubo para bascularlo en la acera. Ni así era capaz de extraerlo? Estaba gordo como una lombriz en mierda. Con la cabeza y medio tronco fuera del cubo, y piernas y brazos encajados en él, parecía un guiñol de feria trágico, de talla humana, ahora derribado al suelo por un pelotazo. Pensé que no necesitaba sacarlo para hacerle la respiración artificial -no tengo móvil, no pasaban coches ni peatones por la calle y los bares estaban cerrados a esas horas, de la recepción del hotel tampoco salía luz y llamar desde casa me llevaría también un tiempo-. Creí más oportuno proceder y que fuera lo que su dios quisiera, ¡Con semejante categoría tendrá ya su poltrona en el Paraíso!, me escuché decir en voz alta. Le coloqué la cabeza, que estaba todavía caliente, flexioné su cuello y le tapé la nariz. Inspiré para insuflar en los pulmones del mitrado la dosis de aire, cuando de sus labios negros salieron unos hilillos de baba repugnantes, como plastilina, que me provocaron el vómito, ¡perdemos facultades, amigos!. Saqué un pañuelo y limpié la pastilla de su cara al tiempo que retiraba las babas. Me disponía a reiniciar el protocolo cuando sentí que me tocaban el hombro. Estaba tan enfrascado en la operación que no lo oí llegar. Era un policía. Salvaron al arzobispo, pero me querían acusar de intento de asesinato, menos mal que mis colmillos no coincidían con las huellas de su cuello.



Puturrú de Fuá.   Déjame que bese al arzobispo.


http://www.youtube.com/watch?v=RbgO9FiAgyk


Salud y felices pesadillas.


ra

lunes, 7 de julio de 2014

3er. Aniversario de Psilicosis: 1000 Entradas


¡Con una sonrisa para todos!


7 de julio San Fermín


Buenos días. Hoy tengo dos motivos para celebrar este día como ya queda reflejado en el título. Y además está San Firmín, la tercera causa en discordia, que es el patrón del blog aunque yo no sea creyente. Pero me gustan los navarros y tengo a la Curruca Kaskanueces de colega, que nació en Pamplona. Eso ya es una garantía milagrosa para mí.

Luis Les Les. Alma navarra.  Pajarito lisonjero.

https://www.youtube.com/watch?v=03AUI4EXz_w

Lo gracioso de esto que he llamado Numeronomía, que no es más que un juego de palabras con la Numerología, la mía, es que los números cuadraron así, sin que yo planificara prácticamente nada. A principios de mayo, cuando programaba alguna entrada para este mes, me di cuenta de que la nº mil iba a coincidir con San Fermín, y por tanto con el tercer aniversario de Psilicosis. Sólo tenia que publicar en mayo y junio 22 entradas en lugar de las 21 de los meses anteriores, para que sumadas a las 4 previstas en la primera semana de julio, este mes, apareciera la cifra mágica. Lo de mágica es adorno.

Lo que sí planifico es el número de entradas mensuales para que al final de año el número total resultante sea capicúa, como un juego más, simplemente porque me gustan los capicúas, como los palíndromos: En 2011, 222; en 2012, 333; en 2013, 313.
Este año aún no sé la cifra, pero allá por Difuntos, si vivo y puedo, empezaré a pensar en ello y trataré de cuadrarla de nuevo. Si todo marchara medianamente bien, que no estoy para hacer proyectos ni a corto plazo...

Hoy tal vez era un día de balances, volver a recordar esa etiqueta de Perdío que tengo arrinconada por no resultar un quejica y un llorón, pensar en voz alta en algún plan de futuro-que no tengo- para esta publicación, hacer eso que llamé metablog y reflexionar sobre lo hecho, los contenidos, las formas, etc. Pero me da mucha pereza. Sí puedo adelantar, aunque creo que ya lo hice en alguna respuesta a un comentario de César o de Ana Capsir, que seguiré saliendo a tirar la basura dos días a la semana hasta final de año, aunque sea a título póstumo. Trataré de colgar una Pindura o dibrujo el último día de cada mes y, mientras pueda, me reiré e intentaré hacer sonreír.

El número de visitas al blog ha ido aumentando lenta pero progresivamente y vamos por las 90.000. He comentado esto en otras ocasiones: con las ediciones de la Psilicosis impresa hacíamos tiradas de 2.000 ejemplares de cada número ¡cada 5 años! Sé que no es lo mismo y desconozco cuantas de las personas que entran en el blog leen los textos. De momento se toparán con las fotos que ya es un punto, pero es indudable que el alcance de este medio, en superficie vamos a decir, es abrumadoramente superior. ¡Y cuántas veces no habré imaginado a la revista en una papelera! El papel estucado no era bueno para limpiarse el culo...

Todo ese ahorro en papel, que son árboles, es importante. Como lo es, desde el nivel del autor, la facilidad e inmediatez de la publicación. Sólo nos faltaría el pequeño estipendio que todo trabajo merecería y que siempre se nos hurtó, con el formato impreso y con el digital. Filosofía de la Miseria y Miseria de la Filosofía. Los autores, y no hablo de la Sociedad General, seguimos desamparados y ninguneados.

Katerina Polemi.   Mesogiakés fonés.  Voces mediterráneas.

https://www.youtube.com/watch?v=_D_YcthSEh4

Psilicosis, cumpleaños y el millar
7 de julio 2011 - 7 de julio 2014 

Grecia sigue siendo para mí un motivo de inspiración, y de salud física y alegría cada vez que vuelvo a ella.

Y agradezco a los amigos y seguidores del blog su apoyo, a partir de aquellos tres primeros valientes, Alberto Prado el Capi, también la causa primera de que empezara con esto, Giannis Tsakós y Ana Capsir. Ahí quedan los nombres de todos ellos, porque mi gratitud es para cada uno:

Alberto. Γιάννης. Ana C. Mabel. José Luis M-R. Vega. Valentín. Balbi. Toño. Teresa. José Luis P. I. Lucas. Fidel. Txell. Señor/a? X. Tomás. Juan Carlos. Andrés. Sendo. Marta. Julia. César T. Armibq. Ana G. Y después de la escritura de esta entrada se incorporaron Tania, y César V., a quienes se lo había pedido, y Jesús, de manera sorpresiva. Más Pepe Jim y Taso.

Mi agradecimiento igualmente a César Ruiz del Árbol Viriato, que ha sido mi comentarista casi diario y mi contertulio más leal. Con buen humor y siempre cariñoso con sus besitos, junto a Ana Capsir.
Espero que los lectores anónimos de estas páginas se animen a intervenir. Los diálogos son a veces más interesantes que las propias entradas, y estamos para aprender.

Kim Fowley.   California Gypsy Man.

https://www.youtube.com/watch?v=2ObhaP5nnLw


¡Un abrazo y que tengamos salud el tiempo que nos toque!


¡Viva San Fermín!


Ramiro Rodríguez Prada

sábado, 5 de julio de 2014

El Pulgarzito y Raimundo Amador


En el Muddy's de Gijón.
Enero, 2013.

El Raimundo y er Púrga


Buenos días. Conociendo al Púlgar, era normal pensar que inevitablemente, tarde o temprano, acabaría encontrándose en la música con Raimundillo.
Por entonces, Kiko Veneno y los hermanos Amador empezaban a tener un nombre en el panorama musical, éstos por sus colaboraciones con el Camarón y la familia Montoya, y Kiko por su tema Volando voy, que daría a conocer el de La Isla.

Además, los tres habían lanzado recientemente su primer LP, Veneno, con aquella portada del nombre grabado en una placa de chocolate. Un disco que rompió moldes respecto al nuevo flamenco-fusión que se venía intentando desde tiempo atrás por varios grupos andaluces de rock, medio sinfónicos, medio aflamencados, caso de Triana o Granada. Y antes por otros como Smash y su Garrotín.
Todos teníamos machacado el disco de Veneno, los admirábamos, los autores eran ya respetados en el mundillo de los aficionados, en especial por los propios músicos.

Y el Púlgar era todavía Pulgarcito, sin cortes ni zetas. Acababa de tener también su lanzamiento por todo lo alto con CBS y aquella canción de Sabina dedicada al Jaro, que el Púlgar sería el encargado de grabar y dar a conocer en primer lugar.

El Púlgar. Alberto Moraga. Raimundo Amador. Candela.


Pulgarcito decía entonces que era un catalán del foro, había nacido en Barcelona y en la adolescencia se había corrido a Madrid, donde se buscaba la vida tocando en el metro y en la calle. Era un desconocido salvo para los que tuvieron la suerte de escucharlo en esos escenarios madroñiles.
Pero también era andaluz, o lo ha sido, a conveniencia, porque parte de su familia procede de esa región.

Después de pasar por un montón de formaciones propias, Pulgarcito y los Punkis Asociados, Yu-Yus, Tapones Visente, entre otras, y de currar de guitarra estrella contratada, Toreros Muertos, La Dama Se Esconde, etc., disfrutó de más oportunidades grabando, durante los años que vivió en Madrid, varios trabajos con canciones suyas y la colaboración de músicos de lujo. Unas veces como el Púlgar y otras como Antonio Rodríguez, su nombre de pila, ¿te bautizaste, pícaro?... . 

Candela es el nombre de su primera hija y el título de uno de sus temas, al alimón con Alberto Moraga,
colega ya de los primeros tiempos, que también firma con él la otra canción, Pa mojar. Ambas
aparecieron en el disco de Raimundo Amador, Noche de flamenco y blues (1998), una grabación en directo
con la presencia estelar del gran BBKing. Pa mojar no está disponible en Youtube.

En Gijón, 2013.
María Morales. Raimundo Amador. Veneno qué bueno.

https://www.youtube.com/watch?v=b01PejVlz_c

Tras dejar el foro y deambular por esos mundos, con otro paso por Barcelona, acabó recalando en Cádiz, en la calle Camarón del Puerto de Santa María, y ahí la cosa framenquita se le puso ya a huevo. Tanto que conoció a Kiko y a Raimundo, con el que acabaría relacionándose y trabajando esporádicamente durante algunos años. Con él y con otros músicos de la Bahía. Recuperaba así sus ancestros andaluces.

Veneno qué buenoPapeles no quiero y Pepe el pingüino, es el siguiente resultado de esta confluencia de genios. Aparecieron el el CD de Raimundo, Un okupa en tu corazón (2000).

Dedicado a la composición para otros músicos durante aquellos años, y bebiendo en su salsa los ritmos sureños, acrecentó su experiencia y siguió componiendo para sí mismo, cada día más abierto a otros sonidos que siempre le interesaron, el funky y el soul especialmente. Uno de sus viejos grupos se llamó Body and Soul...

Las canciones no tuvieron sin embargo el eco que merecían, y eso que nunca renunció a su punto comercial de calidad, y muchos de sus guiños literario-musicales son bien pegadizos y divertidos.

Todos siguen siendo buenos temas que acabarán por reconocerse más pronto o más tarde, si no se los copian como aquel de Lobaylao, ¡en Eurovisión!

Por cuestiones personales que atañen a su vida privada, su nombre queda solapado (según tengo entendido) por el de su compañera de entonces, María Morales, que firma las canciones, la 1ª y la 3ª con Raimundo que, según se cuenta, aprovecha cada riff gerundino para apuntarse a la autoría, un negociante duro de pelar.

Antonio Rodríguez. Raimundo Amador.  Fúmala.

https://www.youtube.com/watch?v=4xyf6jbPdQU

La tercera colaboración apareció en el disco Isla Menor (2003). Los temas son Fúmala, cuyo autor es el mentado Antonio Rodríguez, más alias que su seudónimo de toda la vida, Frito Malaje, con letra suya y de María y música de Raimundo y Álvaro Gandul.

Sólo subí las canciones que están disponibles en la red, me hubiera gustado que fueran todas y enrollarme menos, pero es lo que hay.

Antonio Rodríguez. María Morales. Raimundo Amador. Álvaro Gandul.  Frito.

http://www.goear.com/listen/24f6bc8/frito-raimundo-amador

Frito/ en el sofalito, la mano en la masa/ los pies en la mesa, con una cañita fría/ soñando por bulerías y si no me inrrito/ ay, con el mando del DVD. / Y en la mesilla un florero,/ por si acaso tengo sed./ Frito/ como un pescaito...

Salud y buena música


Ramiro

viernes, 4 de julio de 2014

153


Pichacortas  y  Pelotudos.


Salí a tirar la basura



embutido en mi pijama de lunares y monos con priapismo, atuendo de andar por casa, calzando las pantuflas de los domingos. No me apetecía cambiarme ni poner una bata, era ya muy tarde y no esperaba encontrar a nadie. Además, la noche de verano, muy calurosa, casi invitaba a tomar la calle hasta en pelotas. De hecho varios vecinos en ropa interior charlaban sentados a la puerta del bloque. Un grupo de personas en bolas bajaba por la acera riendo y alborotando. En la parada un par de colegas en calzoncillos se besaban esperando el último autobús de la noche, cuyo chófer conducía a pecho descubierto. Volví al hogar con mi pijama abotonado hasta el cuello, sudoroso y avergonzado.



Leipzig Big Band. Nina Hagen.  Fever.




Salud y felices pesadillas


ra